Buen nivel. Iba perdiendo 2-0 ante los ‘guaraníes’, pero terminó empatando en el Maracaná para sorpresa de muchos.,Río de Janeiro. Agencia Esta historia tiene un comienzo, pero no un final. Lo que se vivió en el Maracaná, aquel estadio que fue testigo de épocas gloriosas del fútbol, refleja la esencia del balompié sudamericano. Paraguay peleó y, a pesar de sus carencias, siempre fue para adelante. Pero al frente estaba Qatar, el vigente campeón de Asia, que llegó a Brasil con la ilusión de construir su legado, a pesar de las dudas que tenía el resto sobre su real nivel. El 2-2 es el reflejo de lo que se vivió en el partido. Paraguay inició el encuentro tomando el rol protagónico y solo necesitó dos minutos para abrir el marcador. Tras un grueso error del central Pedro Miguel, quien saca excesivamente la mano para desviar el balón, el árbitro peruano Diego Haro, con ayuda del VAR, cobra la pena máxima. Óscar Cardozo es el encargado de ejecutar la falta. PUEDES VER Copa América 2019: La temible garra ‘charrúa’ Pese al resultado, Qatar empezó a tocar el balón con jugadas asociadas y pases de profundidad que inquietaron a la portería guaraní. Tuvieron dos situaciones claras de gol, pero sus disparos se fueron desviados. Los números nos indicaban que los asiáticos eran los dueños del encuentro, con 60% de posesión de balón. Pero el fútbol no entiende de justicia, una obra maestra de Derlis González (56’) permitió a Paraguay encontrar el segundo. Sin embargo, en nueve minutos Qatar empató el duelo. Almoez Ali se llevó a dos jugadores y desde el borde del área anotó el descuento, y Khoukhi puso el empate. Al final, un resultado justo.