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El trágico final de “Peter Pan”: Bobby Driscoll, el niño estrella de Disney enterrado en una fosa común

La historia de Bobby Driscoll nos recuerda lo peligroso que puede ser el ascenso a la fama para los más pequeños.

Bobby Driscoll tuvo una fatídica muerte, que solo los más conocedores de "Peter Pan" y Disney recuerdan. Foto: composición/Disney/bobbydriscoll.net
Bobby Driscoll tuvo una fatídica muerte, que solo los más conocedores de "Peter Pan" y Disney recuerdan. Foto: composición/Disney/bobbydriscoll.net

El ascenso a la fama puede ser un camino turbulento, en especial si empieza cuando eres solo un niño. Casos como el de Macaulay Culkin ya nos han mostrado lo trágica que se puede volver la vida de los jóvenes en Hollywood. Pero, lejos del protagonista de “Mi pobre angelito”, hay otra historia mucho más trágica: Bobby Driscoll, el primer Peter Pan del cine, quien pasó de ser una estrella de Disney al protagonista de una triste muerte.

¿Cómo acabó la vida del hombre detrás de aquel mágico personaje de mallas verdes y sombrero puntiagudo?

Peter Pan muerto en una fosa común

En octubre de 1969, un ejecutivo de Disney recibió la llamada de una madre angustiada cuyo marido, que estaba en su lecho de muerte, ansiaba ver a su hijo antes de morir. Un año antes —exactamente el 30 de marzo de 1968— un par de niños que jugaban en las afueras de East Village en Manhattan habían descubierto el cadáver de un hombre de 31 años.

Peter Pan, Bobby Driscoll

Bobby Driscoll fue un joven entusiasta hasta que la pubertad y la fama le pasaron cuentas. Foto: Classic Movie Hub/Twitter

Ya que nadie lo reconoció, tras las pesquisas correspondientes, fue enterrado en una fosa común junto a cientos de vagabundos y cuerpos no reconocidos desde finales del siglo XIX. Pero lo que nadie sabía es que ese hombre era nada menos que Bobby Driscoll, una de las grandes estrellas de Disney que en 1954, durante su adolescencia, se había convertido en Peter Pan y había sorprendido al mundo con su talento.

Bobby Driscoll, el niño que no quería crecer

Bobby Driscoll nació en 1937, en el estado de Iowa. Hijo de un vendedor de material aislante y una profesora, su vida cambió cuando su familia se mudó a Los Ángeles en 1943. El nuevo peluquero de los Driscoll, mediante su hijo actor, les consiguió una audición para un papel en una cinta de Hollywood. Así, aquel pequeño de mirada inocente y actitud perspicaz apareció en “Lost angel” (1943) con apenas 6 años.

Peter Pan, Bobby Driscoll

Bobby Driscoll como Peter Pan. Foto: Walt Disney Archives/Twitter

Entre 1944 y 1945, apareció en películas como “The fighting sullivans”, “Sunday dinner for a soldier”, “The big bonanza” y “Identity unknown”. En 1946 obtuvo uno de los roles principales en “So goes my love”, pero no fue sino hasta 1946 que esta joven promesa firmó un contrato de exclusividad con Disney. “Song of the south” (“Canción del sur”) se convirtió en su salto mundial a la fama.

Finalmente, en 1953, tras protagonizar otros filmes, Driscoll encabezó la película más importante de toda su carrera: “Peter Pan”. En esta producción asumió la peculiar voz y modelo en el que los animadores se basaron para traer a Peter Pan a la vida.

La película recaudó cerca de 41 millones de dólares y se convirtió en un ícono y clásico de la casa del ratón. Pero aquel gran éxito del actor, de 16 años entonces, sería el último de su carrera, pues nunca más volvió a hacer otra cinta. Fue casi como si hubiese querido quedarse en ese lapso de tiempo y no crecer nunca más, al igual que su personaje.

Los monstruos de Driscoll: drogas, delincuencia y pubertad

Sobre su caída no hay nada completamente acertado. El libro “Walt Disney: el príncipe oscuro de Hollywood” describe que podría haber sido víctima de Howard Hughes, quien se volvió dueño de los estudios Disney. El magnate odiaba a los niños de Hollywood, según se lee.

Peter Pan, Bobby Driscoll

Foto del arresto de Bobby Driscoll. Foto: bobbydriscoll.net

También se señala que la pubertad le jugó una mala pasada con un severo caso de acné. Esto, más el estancamiento de su carrera, provocó que poco a poco Bobby se acercara a las drogas.

En un artículo publicado cuando cumplió 21, el actor describió que no era aceptado por los demás. “Me trataban como alguien apartado del grupo. Y yo traté desesperadamente el ser uno de la pandilla. Cuando me rechazaron, peleé de vuelta, me volví agresivo y presumido y estaba con miedo todo el tiempo”, dijo.

Lo que siguió para la estrella fueron algunos papeles en televisión, un matrimonio a los 19 años que terminó en divorcio en 1960, y una gran polémica en su etapa de adulto: acusaciones por agresión con arma de fuego, robos, falsificación de cheques y otros delitos relacionados con las drogas.

Todo esto lo llevó a pasar por un centro de rehabilitación, pero, cuando finalmente salió de este, nunca nadie supo más sobre su persona. Se había esfumado del mapa.

El último adiós a Bobby Driscoll

Gracias a la gestión de Disney, una campaña liderada por su madre, su moribundo padre y la Policía, el cuerpo de Bobby Driscoll fue identificado gracias a sus huellas dactilares.

Peter Pan, Bobby Driscoll

"Canción del sur". Foto: Disney

Tres años después de su fallecimiento, Disney reestrenó en cines “Canción del sur”, otro clásico de la empresa y de la filmografía del actor.

Y se fue su último adiós, el mismo que años más tarde sigue siendo uno triste y casi olvidado conforme siguen pasando los años.