Woman, el filme que reúne a 2 mil mujeres
Festival de venecia. El documental fue grabado en decenas de países. Entre los testimonios está el de Norma Bastidas, récord Guinness del triatlón más grande del mundo.
Mujeres de 50 países. El documental Woman, con testimonios en primera persona, ‘golpeó’ a la crítica en su estreno en el Festival de Venecia. “Es un magnífico documental, conmovedor, que es divertido y triste. Una película poderosa”, ha dicho la crítica europea.
Woman fue codirigida por la periodista y cineasta ucraniana Anastasia Mikova y por Yann Arthus-Bertrand, nominado al premio César. “Les preguntaron por sus sueños, sus miedos, su pasado y su futuro. Por la guerra y el acoso sexual, por su gran amor, su mayor herida y la maternidad. Les pidieron que, por una vez, salieran de las sombras y se situaran bajo los focos, normalmente reservados a sus padres, parejas, hermanos y amigos”, señala el diario El País.
En el documental hablan incluso víctimas del ISIS vendidas por “cinco dólares o un paquete de cigarros”, agrega Mikova. Una mujer de la India atacada con ácido y una rusa que pidió ayuda a su madre tras los desencuentros con su esposo, pero fue culpada por no tener sexo.
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Woman se estrenará de forma comercial el 8 de marzo. Participan venezolanas, francesas, vietnamitas, mujeres de Wall Street, adolescentes, ancianas, mujeres felices, excéntricas, etc. “Muchas nunca habían visto una cámara. Cuando se sentaban y se les daba la oportunidad, veíamos que su necesidad de hablar y ser escuchadas era enorme”.
La cinta tuvo cuatro horas de grabación, pero tuvo que reducirse a 105 minutos y 100 testimonios por motivos comerciales. El primer testimonio es el de Norma (Bastidas). “Llegó a la grabación tan bella, tan segura de sí misma. Entendí que tenía algo único, pero no lo que yo creía”, sostiene la cineasta. Norma contó que de niña sufrió los abusos de su abuelo hasta que escapó a Japón. Pero en ese país encontró otro infierno: fue esclavizada en la prostitución.
“Siguió adelante, se compró su libertad y huyó a Canadá. Allí encontró una pareja y tuvo un hijo. Aunque la vida apenas le concedió descanso: descubrió que, por una enfermedad, su niño estaba destinado a quedarse ciego. Norma se derrumbó, y se refugió en el alcohol. Hasta que un día agarró la botella, volvió a soltarla sin probar ni un trago y salió a correr”, añade El País. Norma Bastidas hoy ofrece conferencias: “Me aterrorizaba compartirlo, pero quería romper el silencio porque es lo que hace posible la violencia. Dicen que las víctimas no tienen voz: sí la tenemos, pero no queremos escucharnos”.
Claves
Primero en las salas. Los ingresos de taquilla los destinarán a crear y financiar la asociación Woman, que se centrará en formar “a las mujeres y niñas de todo el mundo” en la comunicación.