Ciencia

Últimos días para ver al ‘cometa del siglo’ antes de que se aleje por 80.000 años del sistema solar

El cometa Tsuchinshan-ATLAS, apodado el 'cometa del siglo' por astrónomos, está próximo a despedirse de la Tierra. El próximo avistamiento será en 80.000 años.

El cometa puede ser visto con binoculares en las siguientes semanas de octubre. Foto: Gergő Tóth
El cometa puede ser visto con binoculares en las siguientes semanas de octubre. Foto: Gergő Tóth

El cometa Tsuchinshan-ATLAS, conocido como el 'cometa del siglo', ha fascinado a astrónomos y entusiastas por su brillo y magnitud. Catalogado como el cometa más brillante de la última década, ha ofrecido una de las oportunidades más emocionantes para la observación astronómica de este año. Aunque su visibilidad ha comenzado a disminuir, todavía quedan algunos días para disfrutar de este espectáculo celeste antes de que desaparezca del vecindario del sistema solar por miles de años.

El cometa, codificado como c/2023 A3, ha desafiado las predicciones iniciales de los científicos, quienes temían que no resistiera el intenso calor del Sol en su paso cercano. Sin embargo, ha sobrevivido y ahora, desde el hemisferio norte, los aficionados pueden verlo por última vez antes de que se aleje para siempre de nuestra vista. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber para observarlo en sus últimos días de visita.

Últimos días para ver al cometa más brillante-

El cometa Tsuchinshan-ATLAS, también conocido como C/2023 A3, será visible durante el mes de octubre, aunque cada noche su brillo se irá debilitando. Actualmente, se encuentra a una distancia de unos 70 millones de kilómetros de la Tierra, según el portal especializado Space.com. Con el paso de los días, continuará alejándose tanto de nuestro planeta como del Sol. En su momento de mayor visibilidad, alrededor del 12 de octubre, brillaba con tal magnitud que era visible a simple vista en cielos despejados. Sin embargo, con el paso de las semanas, será necesario utilizar binoculares o telescopios para apreciarlo en todo su esplendor.

Se espera que el cometa siga siendo observable hasta finales de octubre, aunque con cada noche que pasa, su brillo disminuye y su ubicación en el cielo se desplaza ligeramente. Los expertos han señalado que la última oportunidad clara para verlo a simple vista será el fin de semana del 20 de octubre, cuando la luna llena ya no será un factor de interferencia. Después de esa fecha, su visibilidad se complicará, y para principios de noviembre, los observadores necesitarán instrumentos más avanzados para detectarlo.

Una vez que Tsuchinshan-ATLAS se aleje, no volverá a acercarse al sistema solar en al menos 80.000 años, lo que convierte esta oportunidad en un evento único.

Es recomendable ubicarse en un lugar de altura para observar mejor al cometa. Foto: José y Hugo Santivañez

Es recomendable ubicarse en un lugar de altura para observar mejor al cometa. Foto: José y Hugo Santivañez

¿Dónde y cómo ver al 'cometa del siglo'?

Para quienes desean contemplar este fenómeno celestial, la clave está en elegir un buen lugar y el momento adecuado para la observación. Desde el hemisferio norte, el cometa es visible justo después del anochecer, aproximadamente 45 minutos después de la puesta del Sol. Es recomendable mirar hacia el oeste, donde se encuentra cerca de la estrella Arcturus, una de las más brillantes en el cielo nocturno, ubicada en la constelación de Boötes.

La luz de la luna llena —conocida como la 'luna del cazador'— que brilla con intensidad entre el 17 y 18 de octubre, puede dificultar la observación. Por eso, se sugiere esperar hasta el 20 de octubre, cuando la luna comenzará a salir más tarde y su influencia en la visibilidad del cometa disminuirá significativamente. A partir de esa fecha, los cielos nocturnos estarán lo suficientemente oscuros para ofrecer las mejores condiciones de observación.

Si bien algunos han logrado verlo a simple vista, lo más recomendable es equiparse con binoculares o un telescopio básico para garantizar una visión clara, especialmente ahora que su brillo está decayendo. Además, es importante buscar un lugar alejado de la contaminación lumínica de las ciudades, ya que las luces artificiales pueden opacar la visibilidad de los detalles del cometa.

 Tsuchinshan-ATLAS es el cometa más brillante de los últimos años, según astrónomos. Foto: Yuri Beletsky

Tsuchinshan-ATLAS es el cometa más brillante de los últimos años, según astrónomos. Foto: Yuri Beletsky

El cometa más brillante del siglo

El cometa Tsuchinshan-ATLAS ha sido apodado como el 'cometa del siglo' debido a su impresionante luminosidad y su rareza. Descubierto en enero de 2023 por el observatorio Tsuchinshan-ATLAS en China, este cuerpo celeste fue descrito como uno de los cometas más brillantes de los últimos tiempos. Aunque se especulaba que podría desintegrarse durante su paso cercano al Sol debido a su naturaleza volátil, sorprendió al mundo científico al sobrevivir y mantenerse intacto.

Los cometas son cuerpos celestes compuestos por roca, hielo y gases. A medida que se acercan al Sol, el calor provoca que el hielo se sublime, creando la característica "cola" brillante que observamos desde la Tierra. Este fenómeno ha hecho que el cometa Tsuchinshan-ATLAS sea un espectáculo visual, ya que su cola ha sido capturada en múltiples imágenes por aficionados y astrónomos profesionales alrededor del mundo.

Aunque el brillo del cometa ha ido disminuyendo a medida que se aleja del Sol y la Tierra, su paso ha sido comparado con otros cometas históricos como el Neowise de 2020, que causó sensación durante la pandemia, y Hale-Bopp, que fue visible en 1997. Sin embargo, a pesar de las comparaciones, este cometa tiene un carácter especial, no solo por su visibilidad, sino por su trayectoria única, que lo alejará del sistema solar durante miles de años.

¿Cómo afecta la contaminación lumínica a la observación de cometas?

La contaminación lumínica afecta gravemente la observación de cometas, especialmente en áreas urbanas y suburbanas. El brillo artificial de las ciudades disminuye el contraste del cielo nocturno, haciendo que objetos celestes como los cometas sean más difíciles de ver. La luz dispersa en el ambiente, generada por alumbrado público y edificios, interfiere con la capacidad de los astrónomos para detectar detalles importantes, como la coma y la cola del cometa, que son particularmente sensibles a estos efectos.

Para una observación óptima de los cometas, es esencial alejarse de las fuentes de luz artificial y observar desde cielos oscuros. En áreas rurales o protegidas de la contaminación lumínica, los cometas se ven con mayor claridad y detalle, permitiendo una apreciación completa de estos fenómenos celestes.