Ciencia

Científicos descifran misteriosas señales provenientes desde lo más profundo del manto de la Tierra

Las señales difíciles de comprender vienen desde lo más profundo de América del Norte. Investigaciones indican que se acumularon durante millones de años debajo de volcanes.

Un grupo de científicos lograron identificar las señales emitidas desde lo más profundo del planeta y descubrir qué significado tienen. Foto: Freepik
Un grupo de científicos lograron identificar las señales emitidas desde lo más profundo del planeta y descubrir qué significado tienen. Foto: Freepik

Un equipo de geofísicos ha logrado descifrar misteriosas señales sísmicas provenientes desde lo más profundo del manto terrestre. El descubrimiento podría cambiar nuestra comprensión del interior de la Tierra. Estas señales, conocidas como precursores PKP, han desconcertado a los científicos durante décadas debido a su comportamiento inusual y su origen enigmático.

Las señales PKP son ondas sísmicas que se detectan antes de las principales ondas sísmicas que viajan a través del núcleo de la Tierra. Estas ondas se propagan desde regiones muy profundas del manto, específicamente desde zonas de velocidad ultrabaja (ULVZ), donde las ondas sísmicas se desaceleran significativamente. Este fenómeno ha sido objeto de estudio por parte de geofísicos de la Universidad de Utah, quienes han arrojado nueva luz sobre estas misteriosas señales.

El misterio de las señales PKP

Durante años, los científicos han utilizado ondas sísmicas para explorar el interior de la Tierra, pero las señales precursoras PKP han sido particularmente difíciles de entender. Estas ondas se dispersan al atravesar el manto inferior y regresan a la superficie a diferentes velocidades, lo que ha complicado su estudio. Sin embargo, la investigación reciente ha revelado que estas ondas parecen propagarse desde lugares muy por debajo de América del Norte y el Pacífico occidental.

 El interior de la tierra. Foto: Michael Thorne

El interior de la tierra. Foto: Michael Thorne

El estudio, publicado en la revista AGU Advances, destaca que las zonas de velocidad ultrabaja podrían estar asociadas con anomalías en el manto terrestre. Estas zonas son capas delgadas donde las ondas sísmicas se desaceleran significativamente, y se cree que podrían ser la raíz de columnas de todo el manto que dan lugar a volcanes calientes. Este hallazgo sugiere una conexión entre las señales precursoras PKP y el vulcanismo observado en regiones como Yellowstone, las islas hawaianas, Samoa, Islandia y las islas Galápagos.

¿Qué importancia tiene el descubrimiento de estas señales PKP?

El descubrimiento de la relación entre las señales precursoras PKP y las zonas de velocidad ultrabaja tiene importantes implicaciones para nuestra comprensión del interior de la Tierra. Según Michael Thorne, profesor asociado de geología y geofísica de la Universidad de Utah, autor principal del estudio, estas zonas de velocidad ultrabaja son algunas de las características más extremas descubiertas en el planeta. Aunque aún no se sabe exactamente qué son, se ha observado que tienden a acumularse debajo de los volcanes calientes, lo que podría explicar su persistencia durante cientos de millones de años.

 Michael Thorne, profesor de geología, utiliza un sismógrafo para las mediciones de terremotos. Foto: Brian Maffly

Michael Thorne, profesor de geología, utiliza un sismógrafo para las mediciones de terremotos. Foto: Brian Maffly

Además, este descubrimiento podría ayudar a los científicos a predecir mejor la actividad volcánica y sísmica en el futuro. Al comprender mejor cómo se propagan las ondas sísmicas a través del manto y cómo interactúan con las zonas de velocidad ultrabaja, los investigadores pueden desarrollar modelos más precisos para anticipar eventos sísmicos y volcánicos.

El método para la observación de este fenómeno

Usando una matriz sísmica de última generación y nuevas observaciones teóricas obtenidas a partir de simulaciones de terremotos desarrolladas por los investigadores, se analizaron los datos de 58 terremotos que ocurrieron en la región de Nueva Guinea y se registraron en América del Norte tras atravesar el planeta.

 La investigación analizó 58 terremotos en diversas partes del mundo. Foto: ADN Rionegro

La investigación analizó 58 terremotos en diversas partes del mundo. Foto: ADN Rionegro

“Puedo colocar receptores virtuales en cualquier lugar de la superficie de la Tierra y esto me indica cómo debería verse el sismograma de un terremoto en ese lugar. Y podemos compararlo con las grabaciones reales que tenemos”, dijo Thorne. “Ahora podemos hacer una proyección retrospectiva de dónde proviene esta energía”.