Satélite de la ESA cae en llamas a la Tierra y es captado en increíbles imágenes
Tras casi 5 años de funcionamiento, el satélite cayó en una maniobra asistida que permitió registrar cómo se convertía en fuego.
El satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA) regresó a la Tierra, casi cinco años después de haber sido lanzado al espacio, y fue fotografiado mientras atravesaba la atmósfera, convertido en un cúmulo de llamas que viajó a 16.700 mph (millas por hora). Recientemente, la entidad espacial compartió las impactantes imágenes del suceso.
Aeolus (Eolo, en español), como fue denominado el satélite —en referencia al ‘Dios de los vientos’, de la mitología griega—, fue la primera nave en orbitar al planeta azul con la tecnología láser capaz de observar el viento a escala global.
El satélite estuvo en órbita durante 4 años, 11 meses y 6 días; transcurrido ese tiempo, se convirtió en desecho espacial en tres horas, según indicó la ESA en una publicación desde su cuenta oficial de Twitter, en la cual compartió los registros visuales este 5 de septiembre.
Para poder obtener las imágenes, la agencia espacial realizó una reentrada asistida del satélite, la primera en su tipo que se haya hecho. Para ello, ESA ordenó a la nave que utilizara su combustible restante para descender de manera progresiva y luego apagarse.
Además, la maniobra implicó mapear con precisión dónde el satélite reingresaba a la atmósfera para reducir el riesgo de que cualquier residuo que no se quemara por completo caiga en algún área poblada.
Se estima que el 80 % del satélite se convirtió en fuego y el 20% restante reingresó a la superficie terrestre, con dirección a la Antártida, según el portal Space.
"Estas imágenes son nuestro último adiós a la misión que todos extrañamos, pero cuyo legado sigue vivo", expresó, en un comunicado oficial, Tomasso Perrinello, director de la misión Aeolus.
Aeolus orbitando la Tierra. Foto: ESA
¿Cómo funcionaba Aeolus?
Según el portal oficial de la ESA, el satélite Aeolus llevaba un sofisticado instrumento denominado Aladin, por Láser Doppler Amosférico, cuya tecnología permitía generar pulsos de luz ultravioleta que se emitían hacia la atmósfera para captar los vientos del mundo.
Además de brindar información sobre los vientos, el satélite también registraba la interacción de la presión, la temperatura y la humedad.
Los datos de Aeolus, monitoreados por el Centro Europeo de Operaciones Espaciales de la ESA, eran utilizados en modelos de calidad de aire para mejorar previsiones de polvo y otras partículas que pudieran afectar a la salud pública.