Ciencia

Enormes incendios arrasaron la Antártida hace 75 millones de años, revela estudio

En aquella etapa de la historia, los dinosaurios deambulaban por la Tierra y sufrieron las consecuencias de una naturaleza impredecible.

Los dinosaurios intentan huir de un incendio forestal en la Antártida durante el Cretácico tardío. Foto: Maurilio Oliveira/Polar Research
Los dinosaurios intentan huir de un incendio forestal en la Antártida durante el Cretácico tardío. Foto: Maurilio Oliveira/Polar Research

Flaviana Jorge de Lima, paleobióloga de la Universidad Federal de Pernambuco en Recife (Brasil), y sus colegas encontraron la primera evidencia de un gran incendio forestal en la isla James Ross de la Antártida al estudiar restos de carbón que perduran allí desde hace 75 millones de años. El artículo está subido a la plataforma de Polar Research.

En esa época de la historia terrestre, denominada Cretácico tardío (entre 100 millones y 66 millones de años antes), los dinosaurios aún reinaban y la isla James Ross, un fragmento de la Península Antártica debajo de América del Sur, albergaba un bosque de coníferas y helechos.

Según Jorge de Lima, los incendios espontáneos de vegetación eran comunes en la Antártida durante el periodo de Campania (hace entre 84 y 72 millones de años).

Sin embargo, el 20 de noviembre de 2014, investigadores de instituciones brasileñas, argentinas y alemanas ya habían adjuntado pruebas de incendios forestales en la era de los dinosaurios, originados en la Antártida occidental. Los resultados se hallan en Paleogeografía, Paleoclimatología, Paleoecología.

La nueva expedición para encontrar residuos de carbón vegetal se llevó a cabo entre los años 2015 y 2016.

La isla James Ross se encuentra al sur de América del Sur. Foto: De Lima, FJ et al. Polar Research (2021)

La isla James Ross se encuentra al sur de América del Sur. Foto: De Lima, FJ et al. Polar Research (2021)

Estos casos de desastres naturales también fueron documentados en Tasmania, Nueva Zelanda y Argentina. En cuanto a los pedazos de carbón, aquellos eran diminutos, pues tenían como medida promedio 19 por 38 milímetros y se parecían en delgadez al papel común.

“La Antártida tuvo una intensa actividad volcánica causada por la tectónica durante el Cretácico, como sugiere la presencia de restos fósiles en estratos relacionados con la caída de ceniza (…). Es plausible que la actividad volcánica ocasionó el paleo-incendio forestal que creó el carbón que se informa aquí”, se explica en el estudio.