Un escándalo más que pone el foco en los ya cuestionados ambientes laborales de las compañías de videojuegos. Alex Kipman, uno de los ejecutivos con mayor aporte a la marca Xbox, acaba de dejar la empresa por denuncias de acoso y acusaciones de haber visto contenido para adultos a través de gafas de realidad virtual en las instalaciones de la empresa.
Inapropiado. Según ha revelado Business Insider, Kipman llegó a realizar tocamientos indebidos a muchas de las colaboradoras de la empresa. Además, es acusado de haber visto “porno en VR” frente a otros empleados.
Los testimonios que aseguran ese comportamiento son numerosos. El portal mencionado asegura que son “docenas”, de empleados, exempleados y exejecutivos de Xbox.
Todos indican que estos hechos forman parte de un patrón extendido de conducta, el cual ya habría provocado que Kipman sea señalado en algunas publicaciones recientes en la prensa.
Tras el hecho, en Microsoft decidieron “cerrar la etapa” y separarse de Kipman. En Redmond todavía no han hecho comentarios acerca de las denuncias, pero sí han confirmado que se harán las investigaciones pertinentes.
La salida de Kipman fue anunciada de manera formal por Scott Guthrie, jefe de la división de servicios en la nube de Microsoft. “Alex aportó con una tremenda visión durante estos años y con grandes avances para la nueva oferta del metaverso”.
Entre los aportes de Kipman destacan algunos productos importantes como la Kinect y las gafas de realidad mixta HoloLens.