Que una franquicia de películas millonaria como Star Wars tenga un buen legado de títulos en la industria de los videojuegos nos debe parecer de lo más normal; sin embargo, acuerdos tan importantes no se crean sin una buena deliberación y eso es justo lo que ocurrió cuando George Lucas abrió su propia división de gaming en la millonaria Lucas Films.
Durante los años 80, las ganancias que las películas de Star Wars habían generado ya eran millonarias. George Lucas, creador de la franquicia, creó un imperio completamente nuevo desde su imaginación y logró plasmarlo en una saga que hacía dinero tan solo por existir, tal cual lo demostraron los juguetes. Era lógico que, en su mente visionaria, los videojuegos formen parte de la ecuación tarde o temprano.
A inicios de los años 80, Lucas ordenó formar una división de videojuegos dentro de LucasFilms, la cual sería bautizada como LucasFilms Games. Al emergente estudio se le dotó de todo: la tecnología más puntera, la libertad creativa, los horarios flexibles, la ausencia de fechas límite (ya comunes en esa época, sobre todo por Atari).
Una única condición balancearía todo ese paraíso para los desarrolladores: LucasFilms Games no podía desarrollar videojuegos de Star Wars. ¿La razón? Un anterior contrato de licencia con Atari, que ya había demostrado la categoría de la franquicia en el rubro con un videojuego que emulaba la emblemática batalla de Hoth.
El equipo de LucasFilm Games (que más adelante pasó a llamarse LucasArts) se vio obligado a desarrollar sus propias franquicias para crear títulos. De este ejercicio creativo nacieron joyas como Ballblazer, y luego éxitos como Monkey Island y los juegos del propio Indiana Jones.
Cuando Atari perdió su posición privilegiado en el mercado tras el crack de 1983, las limitaciones para hacer juegos de Star Wars continuaron debido a que George Lucas siguió confiando en empresas más experimentadas como Namco. Aun así, el momento en el que LucasFilm Games, ya nombrado LucasArts desde 1990, desarrolle su primer juego de la franquicia era inminente.
El proyecto fue propuesto y aprobado, pero la manera de llevarlo a cabo fue particularmente inusual. En primer lugar, el plan era hacer un juego sobre la primera película (Episodio IV: Una nueva esperanza) para la NES, la consola más popular para fines de los 80. Aun así, LucasArts prefería tercerizar aspectos como la programación (la mayor parte) y la distribución. Por ello, el desarrollo estuvo a cargo de Beam Software y el editor fue JVC.
El éxito les sonrió y pronto comenzaron los planes para realizar la secuela, esta vez basada en el Episodio V: El imperio contraataca. Pese a ello, la sensación dentro de LucasArts era de decepción. Creían que la NES era demasiado limitada para lo que querían presentar en el juego. Por suerte, ya para entonces, la nueva consola de Nintendo estaba a las puertas.
Pese a que ya tenían bastante experiencia en el mercado de juegos para PC, en LucasArts entendieron que las consolas –al menos por entonces– eran otro mercado y otro nivel de exigencia técnica. Es por esto que decidieron desarrollar un nuevo juego de Star Wars (episodio 4) con el mismo modelo de alianzas: JVC lo publicaría, y el nuevo partner para el desarrollo sería Sculptured Software (Mortal Kombat III, Virtual Bart, WWF Royal Rumble, etc.).
El proyecto, sin embargo, estaría liderado completamente por LucasArts. Todas las decisiones técnicas, artísticas y de todo tipo estaban a cargo del estudio de George Lucas. Para ello, llamaron a Kalani Streicher, uno de los veteranos del estudio, para ser el director, productor y diseñador principal.
La fórmula fue un éxito y el resultado fue el esperado: las tres películas originales de Star Wars recibieron cada una su propio videojuego, en lo que se convirtió en una de las trilogías clásicas más aclamadas de la Super Nintendo y los juegos en general.
Super Star Wars (SNES):
Super Star Wars: Empires Stirkes Back (SNES):
Super Star Wars: Return of the Jedi (SNES):
“Quería que fuera un side-scroller tan bueno como un Contra o un Castlevania, con la calidad visual de juegos arcade como Willow o Street Fighter, y el gameplay de vehículos usando el Modo 7 como en F-Zero”, dijo Streicher años después.
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El boom de estos títulos animó al estudio a seguir desarrollando más juegos para todas las plataformas. La PC, con todo el potencial gráfico que recibiría desde 1993, recibió clásicos como X-Wing, Rebel Assault y la reconocida serie Jedi Knight. Aun así, desde entonces, nunca hemos vuelto a ver ningún videojuego basado en los tres filmes originales.
La razón no está del todo clara, pues ni siquiera después de la compra de LucasArts por Disney en 2012 volvimos a ver más videojuegos centrados en Luke Skywalker, Han Solo y demás personajes. Quizá sus creadores nunca quisieron quitarle el legado que dejaron los clásicos de SNES, pero lo cierto es que, con la tecnología de hoy, otro trío de títulos basados en ‘Una nueva esperanza’, ‘El imperio contraataca’ y ‘El retorno del Jedi’; serían, probablemente, más que espectaculares.
Respawn Entertainment y Electronic Arts emocionaron a las personas que asistieron al Star Wars Celebration, ya que presentaron el primer teaser tráiler de Star Wars Jedi: Survivor, secuela de Jedi: Fallen Orden que volverá a tener a Cal Kestis como protagonista.
Star Wars Jedi: Survivor está siendo creado por el equipo de desarrolladores experimentados de Respawn Entertainment bajo la dirección de Stig Asmussen, con el que buscarán ofrecer alucinantes historias, mundos, personajes y, como es de esperarse, impresionantes combates con espadas láser.