Con la llegada de las tiendas virtuales de videojuegos en las PCs, se facilitó la opción para tener títulos exclusivos de consolas en tu ordenador. Con ello, las computadoras se convirtieron en otra plataforma para que la comunidad gamer disfrute sus videojuegos favoritos de PlayStation, Nintendo, Xbox, entre otras marcas de la industria.
En consecuencia, los famosos emuladores, unos softwares que se popularizaron en el nuevo milenio, dejaron de sonar por unos años. Actualmente, son una herramienta que ha quedado para la nostalgia, pues se convirtieron en una de las primeras opciones cuando los usuarios trataron de replicar y encajar su juegos para el ordenador, mediante ROMs sin necesidad de hackear ni recurrir a maneras ilícitas de descarga.
La gran problemática con estos programas era la presunta ilegalidad de sus descargas, la cual luego fue refutada en varios juicios a inicios de los 2000′s; no obstante, con el paso del tiempo, las desarrolladoras empezaron a poner mano dura en el asunto y complicaron la emulación de sus títulos, por lo que el escenario actual es incierto, pero los aficionados de los juegos retro aún son fieles a esta movida. En esta nota, conoceremos más de estos programas y un poco de su historia.
En pocas palabras, el emulador es un software que simula una aplicación, consola o dispositivo, adaptable como un programa ejecutable en tu PC; es decir, que recrea una plataforma virtual con todas las condiciones necesarias en nuestro ordenador para poder hacerlo correr sin inconvenientes.
Dicho esto, la emulación permite el buen desempeño de sistemas operativos, consolas de videojuegos o dispositivos desfasados en nuestra computadora, los cuales no solo tratan de imitar al oficial u original, sino que trata de mejorar sus funciones.
Los ROMs son, por su parte, un programa comprimido como archivo, el cual contiene todos los datos de un juego completo que puede leerse y reproducirse en el sistema de un emulador, logrando correr un título cualquiera. Su tamaño de descarga suele ser muy bajo, no obstante, para los videojuegos de última generación, necesitarás cada vez más almacenamiento.
Según varios desarrolladores de emuladores que salieron limpios de sus casos, como, por ejemplo, Emuparadise, quien tiene su web oficial con diferentes emuladores y ROMs de Nintendo, el principal objetivo era traer de vuelta los juegos clásicos del siglo pasado, ya que las consolas se fueron deteriorando y escaseando, por lo que se volvió casi imposible conseguir títulos de Super Nintendo, Atari, GameBoy, por mencionar algunos.
La comunidad gamer alabó la llegada de los emuladores, ya que, según argumentan sus usuarios, ofrecen esa experiencia del pasado de una mejor manera al poder jugarlos en una espacio más cómodo y confiable, pues estos no se malogran en ningún momento, y pueden borrarse y volver a descargar en cualquier momento.
En tanto, hubo una época en la que los más adentrados al mundo de la informática competían en una especie de disciplina tecnológica dentro de la distribución y descarga de ROMs llamada ‘ROM hacking’, donde aficionados a este segmento dedicaban su tiempo a formatear y mejorar diferentes juegos, añadiéndoles todo tipo de elementos, para que luego el mejor sea premiado y puede plantearse un posible DLC con su creación.
La emulación en computadoras ha crecido a pasos agigantados en los últimos años. Algunos de los emuladores más conocidos han estrenado nuevas versiones más potentes y que aprovechan mejor la arquitectura de los procesadores y los aceleradores gráficos modernos. Asimismo, los nuevos API como Vulkan, y la aparición de plataformas perfectas para la experimentación como las Arduino, las Raspberry Pi y las Odroid han favorecido el aumento de esfuerzos en el desarrollo de estas.
Entre los emuladores más conocidos y vigentes en la actualidad podemos mencionar los siguientes: