En 2017, Johan Cristhian Maza Quezada, más conocido como el "ladrón burlón", fue detenido por octava ocasión, lo que resultó en una sentencia de tres meses de prisión preventiva. Este suceso marcó un punto de inflexión en su vida. Tras su liberación, Maza decidió dejar atrás su trayectoria delictiva y capitalizar la notoriedad obtenida en redes sociales. Aprovechando su fama viral, se reinventó como creador de contenido en TikTok, donde logró construir un nuevo futuro.
Actualmente, Maza no solo genera ingresos a través de la plataforma, sino que también trabaja como vendedor ambulante en el emporio comercial de Gamarra, donde se ganó el respeto de sus seguidores al compartir mensajes inspiradores de cambio y superación personal. Su historia de reflexión captó o la atención de miles de usuarios en redes sociales.
Graba contenido para TikTok. Foto: @johan.maza59/ TikTok
Johan Maza Quezada se convirtió en todo un fenómeno en TikTok, donde comparte su día a día como vendedor de ropa en Gamarra, en el distrito de La Victoria, Perú. Su principal fuente de ingresos es la venta de pantalones y otras prendas de vestir, lo que permitió que este personaje viralizado por su pasado delincuencial construya una vida honesta y estable.
En sus videos, Maza combina su característico buen humor con mensajes de reflexión para quienes, como él en el pasado, se encuentran atrapados en el mundo del crimen. "Así como antes me paraba en una esquina esperando una víctima, ahora espero un cliente", menciona en uno de sus videos que alcanzó miles de reproducciones. Además de su trabajo como vendedor, comenzó a colaborar con marcas, haciendo publicidad en redes sociales y aprovechando su popularidad.
La audiencia de Maza en TikTok creció rápidamente. Sus seguidores no solo celebran su transformación, sino que también destacan su humor y autenticidad. Los comentarios en sus videos suelen ser positivos, elogiando su decisión de cambiar de vida. Uno de los mensajes más recurrentes es: "Ahora 'roba' likes, no celulares", en clara alusión a su pasado delictivo.
Gracias a su carisma, Maza logró una conexión única con su audiencia, quienes constantemente le dejan mensajes de apoyo y lo felicitan por su nueva etapa. La mayoría de los usuarios ven en él un ejemplo de que, con la mentalidad correcta, es posible dejar atrás una vida de malas decisiones y buscar una nueva oportunidad.
En el año 2017, Johan Maza fue arrestado en Puente Piedra, Lima, luego de que arrebatara el celular a una madre mientras sostenía a su hijo en brazos. El video de su captura, donde se lo veía sonriente y confiado en ser liberado pronto, se volvió viral en cuestión de horas. Su actitud burlona frente a la policía le ganó el apodo de 'ladrón burlón'.
Tras su octava detención, fue condenado a tres meses de prisión preventiva. Este evento fue un punto de inflexión que lo llevó a reconsiderar su camino y optar por un futuro lejos del crimen. Hoy en día, Maza comparte su historia como un ejemplo de cambio para las nuevas generaciones, advirtiéndoles sobre los peligros de la vida delictiva.