Una de las preguntas más frecuentes que se realizan los usuarios de teléfonos inteligentes, sean Android o iPhone, es la siguiente: ¿qué pasaría si deciden cargar sus celulares con un aparato que tiene una potencia superior al suyo? ¿Explotará el smartphone? Aquí podrás conocer la respuesta.
En un principio, la velocidad de carga que tenían los teléfonos era bastante similar; sin embargo, con el pasar de los años, varios fabricantes, como Xiaomi, Realme, entre otros, han comenzado a apostar por las cargas ultra rápidas que pueden llenar tu batería en 30 minutos.
En la actualidad, el Realme GT Neo3 es uno de los teléfonos con la carga rápida más alta (150 W) que permite pasar de 0% a 100% de la batería en solo 15 minutos. ¿Qué sucedería si usas el cargador de este celular en un equipo que no aguanta dicho tipo de potencias?
Según detalla Xataka, un portal especializado en tecnologías, los fabricantes suelen promover el uso de los propios cargadores; sin embargo, esto no sería del todo cierto, ya que cualquier aparato (que sea original, no pirata) puede funcionar sin problemas.
De acuerdo a la publicación, todos cargadores funcionan exactamente igual: toman la corriente alterna del enchufe (220 voltios) y la transforman en corriente continua. En el proceso, adaptan la tensión y dejan salir la energía con diferentes potencias, puede ser 10 W, 25 W o 150 W.
Sin embargo, es bueno detallar que estos dispositivos no siempre trabajan a su máxima potencia, esto dependerá del equipo al que esté conectado. Es decir, un cargador de 150 W adaptará su potencia para poder cargar un teléfono que admita solo 30 W. En conclusión, tu celular no explotará o se derretirá por utilizar objetos de carga super rápidas. Esto, siempre y cuando sean originales.