En relación con la prohibición del servicio de limpieza de parabrisas en el distrito de Santiago de Surco, el ministro de Trabajo, Alfonso Adrianzén, señaló que no todas las personas que se dedican a este oficio pueden ser consideradas como asesinas. En diálogo con Canal N, el titular de la cartera explicó que “la migración ha generado un enorme contingente de personas que están buscando empleo" y que, al no encontrar oportunidades en mecanismos formales, "tienen que acudir a lo que sea para poder subsistir”.
"(...) Tampoco no hay que estigmatizarlos. Los hechos son lamentables, pero no todas las personas que se dedican a este oficio pueden ser calificados como presuntos asesinos”, indicó. Adrianzén también propuso empadronar a los ciudadanos que se dedican a brindar servicios informales. "Es difícil empadronarlos, pero no imposible”, manifestó.