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Sociedad

Francisco nombra a obispo de Chiclayo como presidente del Dicasterio que designa a obispos en el mundo

El monseñor Robert Francis Prevost desempeñaba funciones como obispo de Chiclayo desde el 2015. Además, se le ha designado como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina.

larepublica.pe
El Papa Francisco le otorgó desde hoy el título de Arzobispo y pasa a ser obispo emérito de Chiclayo. Foto: difusión/ composición LR | Foto: difusión/ composición LR

El papa Francisco ha tomado la decisión de nombrar como prefecto del Dicasterio para los Obispos al monseñor Robert Francis Prevost, quien desempeñaba funciones como obispo de Chiclayo desde el 26 de septiembre de 2015. Asimismo, se informó que fue designado como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL). Cabe precisar que recién el próximo 12 de abril de este año el religioso asumirá el cargo.

A través del boletín diario que emite la Oficina de Prensa de la Santa Sede se indicó que se determinó este fallo tras aceptar la renuncia del cardenal Marc Ouellet, ya que llegó al límite de edad para ocupar dicho cargo. Tras este hecho, el sumo pontífice también le confirió a Prevost el título de arzobispo - obispo emérito de Chiclayo.

El hombre de Dios de 67 años, nacido en Estados Unidos, llegó al Perú en 1985, cuando fue enviado por un año a trabajar en la misión de Chulucanas, Piura. Posteriormente, tras obtener su doctorado y ser elegido director de Vocaciones y director de Misiones de la Provincia Agustiniana Madre del Buen Consejo de Olympia Fields, Illinois, es enviado nuevamente a tierras peruanas para ser director del proyecto de formación común para los aspirantes agustinos de los vicariatos de Chulucanas, Iquitos y Apurímac. 

Según información del Vaticano, ubicado en la archidiócesis de Trujillo, fue vicario judicial (1989-1998), profesor de Derecho Canónico, Patrística y Moral en el seminario mayor San Carlos y San Marcelo. Posteriormente, regresó a su natal Chicago; sin embargo, el 3 de noviembre del 2014, el Papa Francisco lo nombró administrador apostólico de la diócesis de Chiclayo, elevándole a la dignidad episcopal de obispo titular de la diócesis de Sufar.

En diciembre de ese mismo año, fue ordenado obispo en la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe.