Texto y fotos: Juan Carlos Cisneros
Con una segunda ola de la COVID-19 a cuestas, peruanos y extranjeros ven la forma de salir adelante y no rendirse pese a las adversidades de la vida.
En la región Puno, hay personajes que pese a esta problemática buscan seguir. Este es el caso de Nazario Charca, natural de las islas flotantes de Los Uros. Él es conocido como ‘Huancachito’ un real mil oficios. Se desempeña como locutor de radio por las mañanas y músico cuando se requiere.
Otro caso es Emile (28) un ciudadano francés (ingeniero mecánico de profesión) que abandonó su país para radicar en Puno. Él busca sacar adelante su negocio de crepes, postre tradicional de su tierra. También está en la lista el peluquero Honorato, que a pesar de sus años busca salir adelante en esta pandemia.
Nazario ‘Huancachito’ Charca (60). Nacido en las Isla de los Uros, se inició en los años 80 como locutor animador de radio pasando por varias emisoras locales, alegrando hogares con las melodías del ande hasta el día de hoy. La música siempre fue parte de su vida desde niño. Ejecuta la tarola, el charango, etc. También comparte su día con labores relacionadas al turismo en el puerto muelle.
Nazario Charca se desempeña como locutor de radio por las mañanas y músico cuando se requiere. Foto: La República.
Emile Abbasi (28). Nacido en Lyon – Francia, trabajó en Renault como ingeniero mecánico, pero un día decidió cambiar de lugar y se subió a un avión que lo trajo hasta el altiplano peruano. Es dueño de un negocio propio de crepes (postre tradicional francés), en el centro de ciudad de Puno. Se enamoró de una arequipeña a cual visita religiosamente cada semana. La pandemia perjudico drásticamente su negocio y sus planes de vida, pero no se da por vencido y los encontramos todas las tardes a media cuadra del parque Pino.
Honorato Vilca (75). Cuatro hijos, nueve nietos y una bisnieta, tal vez el peluquero con más experiencia en la región Puno. Después de cinco largos meses de estar en casa debido a la pandemia COVID-19 y al ser persona vulnerable , vuelve al segundo piso del mercado central de Puno, para retomar sus actividades, como él dice, por afición los lunes, miércoles y viernes de 9.00 a. m. a 1.00 p. m.