Para muchos fue la primera intervención quirúrgica que les han hecho en sus vidas. La apendicitis, como su nombre lo indica, es la inflamación del apéndice, una bolsa en forma de dedo proyectada desde el colon, en el lado inferior derecho del abdomen. Los primeros síntomas son confundidos con los de una indigestión; sin embargo, consiste en algo más delicado. En la siguiente nota te contamos cómo se manifiesta y cuál es el tratamiento que existe para esta riesgosa enfermedad.
El síntoma más común es un dolor intenso en el abdomen o en la barriga. Consiste en un malestar que comienza, por lo general, cerca de la boca del estómago y se mueve hacia el lado en donde está el apéndice. Y con el paso de las horas se puede agravar y el dolor hacerse más fuerte cuando la persona se mueve, respira profundamente, estornuda o tose. Otros síntomas son:
La apendicitis puede tener más de una causa, la cual está vinculada a algún virus, bacteria o parásito, mas no a la ingesta de alimentos en mal estado. Las posibles causas son:
Probablemente al tener estos síntomas no sospeches de apendicitis, mas sí de una fuerte infección intestinal acompañada de una fiebre alta, por lo que lo más seguro es que acudas a un médico si estos signos se tornan preocupantes.
Lo cierto es que la apendicitis es una emergencia médica que requiere atención inmediata y solo el médico puede ayudar a tratar, aminorar los síntomas y reducir la posibilidad de que ello se complique. Lo más usual es la operación de apéndice, la cual consiste en simplemente extraerlo para que no genere problemas dentro del organismo humano, como el hecho de que se reviente y derive en problemas más severos de salud. Esta apendicectomía dura alrededor de una hora y, luego de ello, el paciente deberá descansar como mínimo una semana y con dieta blanda.
Antes de una cirugía, a toda persona que acude a un centro de salud con síntomas de apendicitis se le suministran antibióticos, con la posibilidad de que mejore y la intervención no sea necesaria.
Se está investigando acerca de quiénes podrían evitar la cirugía de manera segura basándose en sus síntomas y la edad. Sin embargo, de momento, la cirugía es el tratamiento más efectivo, puesto que es difícil que un paciente sospeche o detecte que tiene apendicitis con los primeros síntomas y para cuando que acude al médico ya es necesario que sea operado.