Isabel Carreño G. La Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) reeligió a su rector Marcial Rubio, quien desde hace dos años se comprometió a dialogar con la Comisión de Cardenales para dar solución al enfrentamiento con la Iglesia Católica del Perú. Hoy es firme al decir que no hay nada que conversar con Cipriani, pero sí con el Vaticano. Fue reelecto como rector, ¿qué significa este nuevo respaldo? Nosotros hemos ofrecido trabajar por la autonomía y por el espíritu católico de la Universidad. Hay un diálogo con la Iglesia a tráves de una comisión de tres cardenales nombrados por el Papa Francisco, y nos han encargado que conduzcamos este diálogo. La idea que hemos dado es que, concluidas estas conversaciones, nosotros devolveremos el poder. ¿Solo está para las negociaciones con el Vaticano? Hemos ofrecido renunciar ante la Asamblea Universitaria para que se convoquen a nuevas elecciones. Meses atrás usted se negó a postular... Me negué porque consideraba que había cumplido mi función de cinco años que se cumplen el domingo (hoy). Pero hubo una comunicación de la visita de estos tres cardenales y entonces un grupo muy grande de profesores que integraban la asamblea anterior nos pidió a los cuatro del rectorado que postuláramos para que, en caso de ser elegidos, dirigiéramos estas conversaciones. ¿Cuándo vendrá la comisión? Esto se supo a finales de abril o a principios de mayo, no recuerdo bien. Me imagino que deberán venir cuando se acaben las vacaciones de Europa, que ocurren en julio y agosto. La otra lista, la de Eduardo Ísmodes, ¿estaba vinculada al cardenal Juan Luis Cipriani? Eso se ha dicho, yo no lo sé. Pero él tiene una posición distinta a la nuestra. ¿Cuál? Porque incluso planteaba que usted conforme la comisión... Esa era la diferencia formal, pero la real era que él creía que podía establecer un diálogo fructífero con el cardenal Cipriani, y nosotros sabemos que con el cardenal no hay nada que hablar. Entonces, ¿cómo van las negociaciones con el Vaticano? Las conversaciones vienen desde hace cuarenta años, no son nuevas. Hay ciertos puntos críticos que son de público conocimiento: cómo se elige al rector, si los bienes son de la Universidad o de la Iglesia, si nosotros estamos sometidos al derecho peruano o al derecho canónico. Sobre eso hay diversos planteamientos, de manera que si tenemos un buen diálogo se puede solucionar de forma definitiva. ¿Podría solucionarse este año? Esto puede ser cosa del próximo año. En el transcurso de doce meses, pero no depende solo de nosotros. ¿Por qué no se puede conversar con el cardenal Cipriani? Él no quiere. Lo que busca es tomar la propiedad de los bienes de la universidad, eso lo dijo el 8 de abril del 2012 en una entrevista. Nosotros hablamos con él, llegamos a acuerdos pero el cardenal pensó que no. Nosotros queremos la paz. ¿Qué se quiere hacer con las propiedades? Para el derecho peruano son de la universidad, están inscritos en la SUNARP. Entonces creemos que debemos administrarlos nosotros y el cardenal dice que son bienes eclesiásticos y los debe manejar la iglesia. Los bienes en discusión son el campus, Plaza San Miguel, que ayuda a que las pensiones no sean tan altas, y otros bienes. ¿Quieren tener facultades en la administración? Nosotros somos los que estudiamos aquí y enseñamos. Sabemos como se usan estos bienes y lo hacemos. Mientras que el cardenal tiene que salvar almas, su trabajo no es administrar. No lo sabe hacer. Estos bienes rinden frutos económicos altos... Es público que la universidad maneja un presupuesto del orden de 600 millones de soles al año. Hay mucho dinero y se debe manejar bien. El otro tema es la autonomía. El cardenal quería interferir... Él tiene algunas ideas. Por ejemplo, cree que las personas que tienen una orientación homosexual deben estar restringidas en sus derechos, y nosotros no creemos eso. También piensa que las personas deben tener una educación católica que va más allá de sus libertades, y tampoco creemos eso. ¿Se quiere imponer? El cardenal Cipriani persigue más de lo que debe los bienes de la universidad y tiene una idea autoritaria de cómo se debe educar a los jóvenes. Uds. defenderán la autonomía. En cosas muy concretas: decidir sobre la parte académica, la investigación, el manejo de los bienes. En lo referente al estatuto reconocemos, como siempre lo hemos hecho, que el cardenal designa al capellán del campus y toma decisiones sobre los cursos de teología. Cuando nos ha pedido que dejemos de dictar teología, lo hemos hecho. Pero cuando me dice: “¿Qué hacen los homosexuales allí?”, yo le respondo: “Están estudiando”. El Perú es un estado laico, ¿por qué mantener el vínculo con la iglesia Católica? Para nosotros tiene un valor concreto. La decisión que hay de forma mayoritaria en la universidad es mantener el vínculo católico. Paso a otro tema. ¿Están conformes con la Ley Universitaria? Para dar una opinión definitiva estamos esperando que salga publicada la ley. En general, estamos de acuerdo con que hayan más exigencias, que exista la acreditación, requisitos mínimos para que se pueda iniciar el trabajo de la universidad y con que haya una participación del Estado en el diseño de la políticas educativas. Pero... Tenemos la preocupación de que esa Superintendencia pueda excederse un poco en las funciones. Hay ciertas cosas con las que tenemos reparos porque podría afectarse la autonomía. Tiene que haber funciones más claras. Lo que sí criticamos es que desaparezca la Asamblea Nacional de Rectores. Pero es cuestionable el trabajo del Consejo Nacional para la Autorizacion de Funcionamiento de Universidades de la ANR... Creemos que debe haber una ANR pero sin funciones de administración pública. A la ANR se le han atribuido cosas ciertas y falsas. Por ejemplo, si nosotros somos los rectores, no podemos juzgar rectores, pero la que nos hizo hacer eso fue la ley. Se ha dicho que el Conafu hacia las cosas mal, pero ellos no consultaban con la ANR. Es real que hay crisis en la calidad de las universidades... Sí, pero eso se debe a la ley de privatización de la universidad y del establecimiento de la universidad de lucro porque todas esas filiales son de universidades de lucro. Te puedo decir, como rector de la Católica, que si quisera sacar lucro de acá, tendría que bajar inmediatamente la calidad. Compro los microscopios de dos mil soles y no los de un millón, etc. Pero eso no es culpa de la ANR. La ANR admitió que no hay profesores para tesis... Es cierto. Si las universidades no tienen profesores a tiempo completo, no pueden asesorar trabajos de investigación, y tienen que tenerlos. Consideramos que es una buena medida. Nosotros tenemos más del 25% a tiempo completo. Las públicas no pueden asesorar porque el Estado no les da dinero, ahora lo tendrán que hacer. Eso va a afectar a las universidades-negocio. ¿Y eso se podría convertir en más costos para los alumnos? Esto va a significar que las universidades van a subir sus costos, las que no tienen el 25% del profesorado. En este país, el sistema universitario tiene como eje a las privadas, cuando debiera tener a las universidades públicas. Particularmente creo que hay universidades públicas muy buenas, como San Marcos, la UNI, la Agraria. Te puedo asegurar, como autoridad de una universidad privada, que las públicas hacen milagros para ser buenas universidades, a pesar del Estado. Tiene que haber inversión.