En su alocución, Beatriz Merino advirtió que fenómenos como la inseguridad ciudadana, el narcotráfico y la corrupción debilitan a las instituciones democráticas. En el marco de la séptima Asamblea Mundial pro Democracia que se desarrolla en Lima, la ex Defensora del Pueblo indicó que vivimos una bonanza económica pero tenemos instituciones débiles y un poder Ejecutivo poderoso. Advirtió que miles de peruanos no tienen DNI, tampoco conocen sus derechos y por tanto no se sienten parte del país. A su turno, en el panel que trató 'La Experiencia de democracia en el Perú', Salomón Lerner Febres manifestó que las instituciones que deben defender los derechos de los ciudadanos no funcionan, y consideró que el crecimiento económico no es precisamente desarrollo. Esta percepción fue reafirmada por Cecilia Blondet, quien anotó que después de la recuperación de la democracia en el 2000 se produjo un relajamiento en el fortalecimiento de sus bases, especialmente en la lucha contra la corrupción y la defensa de los derechos humanos. Mientras que el embajador del Perú en Estados Unidos, Harold Forsyth, hizo una autocrítica sobre la actitud de la sociedad civil en defensa de la democracia durante la dictadura. Agregó que no hubo capacidad de captar a la juventud, se rompió la comunicación con la iglesia, se politizó los derechos humanos, no se trabajó con organizaciones sindicales, y también se abandonó a las universidades como lugar de debate.