Por: Diego Quispe Sánchez
La Junta de Portavoces del Congreso acordó citar a los ministros de Economía, Carlos Oliva, y de Energía y Minas, Francisco Ísmodes, para que respondan ante el Pleno por la suspensión del proyecto minero Tía María, de Arequipa. Previo a la reunión, los ánimos en el fujimorismo, el Apra y sus aliados apuntaban a buscar un argumento concreto para promover la vacancia presidencial contra el presidente Martín Vizcarra, según fuentes del Parlamento.
En principio, la agenda que iban a tratar los portavoces se referiría a dos temas: el adelanto de elecciones el 2020 y el audio de la conversación del jefe del Estado con autoridades de Arequipa acerca de Tía María.
Antes de ingresar a la sesión en la sala Jorge Basadre, el congresista de Fuerza Popular (FP) Carlos Tubino calificó de mentiroso al mandatario. “Nosotros no vamos a permitir que personas que han engañado a su propio grupo político vengan a imponer una agenda por la que la gente no votó”, expresó.
Su colega de Contigo Salvador Heresi consideró que el presidente tuvo un doble discurso al sostener que el proyecto Tía María iba a salir a flote y luego postergar su ejecución. En tanto, Víctor García Belaunde (AP) dijo que el ministro Ísmodes debe ser retirado del cargo “de todas maneras”.
Durante la conversación de voceros y la Mesa Directiva, dirigida por Pedro Olaechea, la discusión sobre el adelanto de elecciones se dejó a un lado y, más bien, todo se centró en el audio de Vizcarra con los gobernadores arequipeños. Las bancadas de oposición insistieron en que ahí se planeó la suspensión del proyecto minero.
Según Alberto Quintanilla (Nuevo Perú), en la Junta de Portavoces los fujimoristas y apristas plantearon, al principio, citar, además de Oliva e Ísmodes, a los ministros del Interior, Carlos Morán, y de Defensa, Juan Moscoso, debido a las protestas en el Valle de Tambo y porque fue, precisamente, la violencia social el factor tomado en cuenta por el Consejo de Minería para suspender la licencia del proyecto a cargo de Southern (ver comunicado en página 14). Pero la iniciativa no contó con el respaldo de las doce bancadas.
Quintanilla criticó que se cite a los ministros de Economía y Energía y Minas cuando, según el reglamento del Congreso, la única manera de convocar a las autoridades es a través de una moción aprobada en el Pleno o en comisiones.
Además, Quintanilla recordó a sus colegas las dos mociones de interpelación –una de Nuevo Perú y otra del Frente Amplio– contra Ísmodes que aún no son debatidas en el Pleno. Agregó que las bancadas de oposición no desean interpelar a ningún ministro por temor a que esta se convierta en una moción de censura y el presidente Vizcarra reaccione con una cuestión de confianza y, luego, disuelva este Congreso.
Al terminar la jornada, el vocero de PPK, Clemente Flores, afirmó que García Belaunde propuso formular una moción de vacancia contra Vizcarra. “Los de Fuerza Popular trataron de seguirle el coro, pero luego se desinflaron porque no tienen los votos”, dijo. Luego de la advertencia de Flores, el aprista Mauricio Mulder anunció que su bancada promoverá vacar al presidente. El oficialista Jorge Meléndez reaccionó publicando en Twitter que “la alianza mayoritaria del Congreso pretende impulsar un trasnochado pedido de vacancia presidencial, con el único propósito de cerrarle el paso al adelanto de elecciones”.
Pero al final de la noche, el fujimorista Tubino negó esa versión y Luciana León, vocera del Apra, dijo que la iniciativa de Mulder era a título personal.
- Ayer se inició un paro indefinido en Moquegua contra el proyecto cuprífero de Quellaveco, a cargo de Anglo American. Según el gobernador de esta región, Zenón Cuevas, la empresa no cumplió con los acuerdos adoptados con la población hace siete años.
- Uno de estos acuerdos, denunció Cuevas, fue contratar a 80% de mano obra de no calificada. Sin embargo, agregó que, actualmente, el proyecto Quellaveco cuenta con “60% de trabajadores foráneos, mientras que el 40% restante son de Moquegua”.
- A través de un comunicado, Anglo American respondió que hasta junio último el 96% de la mano de obra no calificada proviene de Moquegua.