El viernes 28, el fiscal Carlos Puma del Equipo Especial Lava Jato formuló el pedido de impedimento de salida por ocho meses contra Luis Castañeda Lossio en el caso de adendas del proyecto Línea Amarilla y el aumento de peajes.
La investigación involucra también al excongresista José Luna Gálvez, así como a la exfuncionaria municipal Giselle Zegarra. La medida solicitada también los alcanza. Luna Gálvez fue secretario general de Solidaridad Nacional, al igual que Martín Bustamante, otro implicado.
Se conoció la declaración del expresidente de OAS, Leo Pinheiro, sobre el aporte de 100 mil dólares de la constructora brasileña para la campaña municipal de Luis Castañeda. Sin embargo, un colaborador eficaz señaló que el dinero entregado fue de 220 mil. Sin embargo, el caso va por las acciones tomadas en la tercera gestión edil del ‘Mudo’.
El proyecto de la Línea Amarilla fue presentado por OAS en el 2009. Para el 12 de noviembre de ese año se suscribió el contrato entre la constructora brasileña y la Municipalidad de Lima. No obstante, detrás de esto hubo presuntas irregularidades, dado que el trayecto inicial de la autopista era de 13 kilómetros, posteriormente fue de 9 km, aunque la medida sería de 7,54 km.
Además, el valor propuesto por OAS en el 2009 era de 482 millones de dólares a falta de intereses, IGV y garantías de pago. Se presentaron dos informes, uno el 11 de junio de ese año y otro al día siguiente, elevando el valor de la obra de 351 millones a 462 millones.
En la gestión de Susana Villarán, el 13 de febrero del 2013 se firmó la adenda 1 en la que se extiende la concesión de la Línea Amarilla con Lamsac, a cargo de OAS, de 30 a 40 años, a cambio de una inversión de $132 millones y entregar el 7% de la recaudación. Sin embargo, se suscribieron otras dos adendas durante la tercera etapa de Luis Castañeda en la Municipalidad de Lima.
La adenda 2 se firmó el 2 de octubre del 2015, con las rúbricas de Bruno Lucchetti Rodríguez, entonces gerente de Promoción de la Inversión Privada de la MML, Carlos Moreno Tavares, gerente general de Lamsac, y el apoderado de la concesionaria, Hernique Nanni de Almeida.
En esta se elimina el proyecto Río Verde, modificándose por el del by-pass de la avenida 28 de Julio y la alameda del lugar. Lamsac estaba obligado de realizar la transferencia de $74,5 millones por este proyecto. Asimismo, se añade la construcción del paso inferior – intersección entre la avenida Morales Duárez y Universitaria, así como el puente Bella Unión y un nuevo carril en cada sentido de la Vía Evitamiento entre la av. Javier Prado y el puente Huáscar.
La adenda 3 se suscribió el 15 de abril del 2016. Para entonces Jaime Villafuerte Quiroz era el jefe del área de Promoción de la Inversión Privada. Para esta ocasión, para la obra del Puente Bella Unión, el “derecho de vía” se le añade a la ordenanza municipal. Además, se actualizan de los montos del proyecto estipulados en el contrato del 2009.
Estas dos adendas forman parte de la investigación por la que el fiscal Carlos Puma ha pedido impedimento de salida contra los seis implicados, incluyendo a Bruno Lucchetti y a Jaime Villafuerte.
Para el 2012, OAS vendió Lamsac –a cargo del proyecto Línea Amarilla– a la brasileña Invepar. El principal accionista de esta era la constructora mencionada. Para el 5 de agosto del 2016, Invepar vendió Lamsac a la francesa Vinci Highways por 1 430 millones de dólares. Un año antes se había condenado a Leo Pinheiro por corrupción. Antes estuvo detenido desde el 14 de noviembre del 2014.
La Contraloría General de la República había señalado que la municipalidad de Lima tuvo que ser fiscalizador respecto a esta última operación, mientras que Vinci indicó que la comuna capitalina “validó nuestra participación como socio estratégico del proyecto”.
En la declaración del colaborador eficaz 101, este indica que Leo Pinheiro le ofreció trabajo a Giselle Zegarra para un proyecto. Era para “aprovecharse de la relación de Zegarra con (Luis) Castañeda, dado que el entonces candidato había asumido que OAS tuvo una postura en favor de Susana Villarán.
El proyecto de OAS para Zegarra era por la elaboración de “una iniciativa similar privada al Puerto Maravilla en Río de Janeiro”, añade que la llevó a Brasil para que conozca distintas obras realizadas por la constructora. El viaje de ella a Brasil fue entre el 9 al 12 de septiembre del 2014, un mes antes de las elecciones municipales.
El colaborador eficaz indica que desde OAS se conocía que Giselle Zegarra “no podía llevar adelante ese proyecto”, dado que se necesitaba un mejor estudio jurídico y más presupuesto. Sin embargo, para la empresa, “era darle trabajo para que influyera sobre Castañeda”. El trabajo de la exfuncionaria municipal era por un proyecto de la Costa Verde que OAS buscaba ofrecer.
Una boleta de pago de Zegarra Asociados se indica que hubo asesoría a OAS entre septiembre y octubre del 2014 por 24 mil dólares. Con IGV, $28 320. Según Panorama, luego se entregó dinero en tres oportunidades de la consultora. Además, hubo un contrato de prestación con un sueldo de 12 mil mensuales para la exfuncionaria, mientras que ella iba a recibir medio millón si se cerraba la operación.
Cabe recordar que Giselle Zegarra le había indicado a Leo Pinheiro, por pedido de Luis Castañeda, que no firmen el contrato por el proyecto Río Verde de Susana Villarán, además de que se reduzca la publicidad de este. Estas conversaciones se dieron cuando Castañeda era alcalde electo, aunque todavía no estaba en funciones.
El incremento al precio de peajes, tanto en la Línea Amarilla como en Vías Nuevas de Lima –concesionado a Rutas de Lima, entonces a cargo de Odebrecht–, fue una constante en las gestiones de Susana Villarán y Luis Castañeda Lossio.
Para marzo del 2016, Lamsac –todavía a cargo de Invepar– aumentó el precio del peaje de S/4,50 a S/5 para los vehículos livianos, particulares y pesados por eje. En diciembre de ese año, Rutas de Lima también aumentó la tarifa de S/4,50 a S/5 para livianos y de S/3,50 a S/4,50 en pesados.
Mediante un acuerdo con Rutas de Lima en junio de ese año, se realizó un aumento escalonado en el peaje. Para ese mes, Odebrecht vendió Rutas de Lima a la canadiense Brookfield Asset.
Actualmente, el peaje de la Vía Evitamiento y la Línea Amarilla es de S/5,70 y en la Panamericana Norte y Sur S/5,50.