Tres exmiembros directivos de la constructora brasileña OAS, confesaron ante los fiscales peruanos en un interrogatorio en Sao Paulo, Brasil, el pasado 15 de marzo, que antes de ganar la alcaldía de Lima, Luis Castañeda Lossio le advirtió al Leo Pinheiro, expresidente de la empresa, que dejara de invertir en el proyecto Río Verde que impulsaba la entonces alcaldesa Susana Villarán.
Los colaboradores revelaron a los fiscales del Equipo Especial Lava Jato Carlos Puma Quispe y Milagros Salazar Paiva, que Castañeda le sugirió a Pinheiro que ya no continuara apoyando el proyecto promovido por Susana Villarán, pues, de lo contrario, una vez que ganara las elecciones, lo cancelaría, según informó El Comercio.
De acuerdo al testimonio del colaborador N°110, la concesionaria del proyecto Línea Amarilla —llamado después Río Verde— “tenía la obligación de un aporte de aproximadamente US$70 millones” para el proyecto que promovía Susana Villarán, aporte que era una obligación que había asumido OAS y que debía ejecutar.
Sin embargo, poco antes de que se definieran las elecciones municipales ese año, Pinheiro fue contactado por Castañeda Lossio, comunicación en la que, según señala el colaborador, el expresidente de OAS recibió “una orientación” para que no siguiera con Río Verde, pues este no era parte del “programa de gobierno” del líder de Solidaridad Nacional.
"La gestión de Susana Villarán presentó un proyecto llamado un máster plan muy grande llamado Río Verde [y] los US$70 millones no eran suficientes para cumplir con dicho máster plan […]. Durante la etapa final de negociaciones, creo que más o menos entre setiembre u octubre del 2014, en que Luis Castañeda ya apuntaba como favorito, Leo Pinheiro recibió una orientación de Luis Castañeda que no siguiera con ese proyecto porque no era su programa de gobierno y que si suscribía ese contrato, al día siguiente lo cancelaría”, señaló el colaborador, según apunta El Comercio.
De acuerdo al colaborador, este conversación ocurrió en setiembre de 2014, un mes antes de que Castañeda Lossio saliera electo alcalde de Lima por tercera vez.
Por esa fecha, dos ejecutivos de OAS, Ricardo Ulm Da Silva y Clayton Gonçalves Holanda, trabajaban en la etapa final del cierre del contrato por Río Verde con la gestión de Susana Villarán. Sin embargo, para evitar firmarlo, presentaron algunas observaciones al documento.
Ya cuando Castañeda Lossio resultó electo alcalde el 5 de octubre de 2014, este y el exidrector de obras de OAS, Leonardo Fracassi, sostuvieron una reunión con sus asesores a fin de definir los proyectos viales que reemplazarían a Río Verde.
Según el colaborador N°110: “Ricardo Ulm Da Silva participó en varias reuniones hasta que se definió [construir] el ‘by-pass’ de 28 de Julio. A partir de ese momento se hicieron estudios más detallados para que durante los primeros días del gobierno del nuevo alcalde se pudiera anunciar ese proyecto”.
De acuerdo al testimonio de este colaborador, algunas de las reuniones técnicas se llevaron a cabo en la oficina de OAS. Además, el colaborador reveló que "durante toda la etapa de aprobación del proyecto del presupuesto participaron los asesores del alcalde”.
Otro colaborador, identificado con el numeral N°101, detalló que Leo Pinheiro buscó acercarse a Castañeda Lossio a través de Giselle Zegarra, quien fue gerenta de Promoción de la Inversión Privada de la Municipalidad de Lima durante su gestión.
Según su testimonio, Pinheiro tenía la certidumbre de que “Castañeda tomó de forma personal los cambios que se habían hecho en el proyecto”, que originalmente fue la Línea Amarilla y que Villarán cambió por Río Verde.
De acuerdo al colaborador N° 101, Pinheiro pensaba que Castañeda había asumido esa situación "como si OAS hubiera tomado partido a favor de la entonces alcaldesa”.
Por otro lado, el último colaborador, el N°120, le entregó a los fiscales Puma y Salazar un correo electrónico del 21 de noviembre de 2014. En este, se comprueba que los ejecutivos de OAS "estuvieron trabajando para el ‘by-pass’ de 28 de julio, antes de que se inicie el gobierno de Castañeda y al mismo tiempo estábamos retrasando el proyecto Río Verde que era [la] voluntad de la señora Villarán”.