La izquierda ha pasado de ser “caviar” a ser “terruca”. Así estamos. Me pregunto si reaccionaremos a tiempo.,Hace unos días, un iracundo Ricardo Vásquez Kunze en una columna de la página Web Política.pe (22/05/18), sostenía que en una “cultura de la libertad no debe haber lugares de la memoria porque no existe la “memoria colectiva” … Quien da loas al Lugar de la Memoria no es un liberal, mucho menos un libertario: es un autoritario como todo caviar”, para luego terminar su perorata con un grito de guerra: “¡Abajo el lugar de la memoria! ¡Viva la libertad!”. Dos días antes, Francisco Tudela, excanciller y exvicepresidente del régimen fujimorista, sostenía en una entrevista al diario Correo (20/05/18) que el “LUM es la falsificación deliberada de la historia” y que ello era consecuencia del “control -casi absoluto- de los espacios de pensamiento por el neomarxismo que vuelve a sus orígenes” (20/05/18). Para Tudela este pensamiento estaba prácticamente, en cada rincón de la sociedad peruana. En estos días está circulando en las redes sociales una “carta abierta” sobre el LUM. La carta, firmada por los anteriormente nombrados, más Rafael Rey, Luis Gonzales Posada, Philiph Butters, Madeleine Osterling, Juan Carlos Fisher, José Barba, entre otros, repite los argumentos tanto de Vásquez Kunze como de Tudela. En esta suerte de manifiesto se dice que en estos últimos veinte años una élite -los llaman “mandarines de la cultura”- ha logrado reescribir la historia del terrorismo marxista, para luego añadir que los terroristas de SL y el MRTA se han reciclado “hoy en el Congreso”. También dicen que estos mismos “mandarines de la cultura”, junto con las ONGs y organismos internacionales crearon tanto la Comisión de la Verdad como el LUM para “arrogarse el monopolio de la verdad y de la memoria histórica” e imponer “siempre su ideología marxista”. Sin duda estas ideas y afirmaciones no resisten un análisis más o menos serio. Decir que el marxismo o el neomarxismo está en todos los rincones del país y que es hegemónico en el mundo de la cultura y la política, o que los “terroristas” se han reciclado en el Congreso es simplemente un absurdo por no decir una gran tontería. Y si bien estos personajes que alientan un pensamiento reaccionario y un abierto macartismo uno los encuentra en el fujimorismo, en la derecha, en el APRA y en los otros grupos políticos y religiosos, no son los únicos que animan estas posturas antidemocráticas. Si se lee el editorial de El Comercio: “Una purga como la de antaño” (29/05/18) sobre el caso de Lesly Shica y la ministra de Inclusión Social, queda claro que este diario no está tan lejos del espíritu de los que hoy promueven ideas y posturas antidemocráticas. Lesly Shica es una asesora (puesto de confianza) del MIDIS cuyo contrato habría sido rescindido por este ministerio debido a sus declaraciones en contra de la congresista María Elena Foronda del Frente Amplio por haber contratado para su despacho a una persona vinculada en el pasado al MRTA. Sobre este hecho El Comercio dice: “Como se recordará, la actual titular del Midis, Liliana La Rosa Huertas, militó en el Frente Amplio hasta enero de este año. Y no se apartó por discrepancias doctrinarias o problemas semejantes, sino porque le tocó asumir responsabilidades como decana del Colegio de Enfermeros y, según dijo, “no podía estar en otras cosas”. Lo que sugiere la prevalencia de una sintonía ideológica que explicaría la aparente irritación hacia quien había criticado a la parlamentaria Foronda”. Sería bueno preguntarle al que escribió y/o autorizó este editorial que nos diga cómo debemos entender “la prevalencia de una sintonía ideológica que explicaría la aparente irritación” de la ministra y que la llevó a despedir Lesly Shica. Es decir, si creen que la ministra La Rosa y la congresista Foronda, como dice la carta firmada por Tudela y otros, son ejemplos de cómo el “terrorismo se ha reciclado en el Congreso” y en el Ejecutivo. Dicho con otras palabras, si El Comercio cree que el Frente Amplio y los otros partidos de izquierda son autoritarios y terroristas. No esta demás recordar que Lesly Shica forma parte del equipo de la página web Política.pe donde escriben Madeleine Osterling y Ricardo Vásquez Kunze, firmantes de la “carta pública” mencionada. No es extraño en este contexto que el llamado “terruqueo” esté hoy de moda. La izquierda ha pasado de ser “caviar” a ser “terruca”. Así estamos. Me pregunto si reaccionaremos a tiempo.