Southern Perú suspendió temporalmente operaciones en su Fundición de Ilo, en Moquegua, dado que no dispone de la cantidad suficiente de concentrado de cobre para producir cátodos en la proporción normal.
Dicha medida se adoptó como consecuencia de las medidas de fuerza que acatan comuneros de Tumilaca, Pocata, Coscore y Tala, que tomaron el reservorio Viña Blanca que abastece a la población y operaciones mineras de Cuajone.
Sin el recurso hídrico, que dejó de ingresar a la planta concentradora desde el 28 de febrero, la producción de concentrado se detuvo, lo que generó un daño en cadena en el proceso productivo.
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Debido a la medida de fuerza de los comuneros, que incluye el cierre de la vía férrea, la empresa envió el concentrado que tenía en reserva almacenado en Cuajone, por vía terrestre.
“Dicha reserva se agotó y obliga a Fundición a realizar la suspensión temporal en sus operaciones los días 16 y 17 de marzo. La compañía dispuso que los días posteriores se tomará la misma medida de manera escalonada, en vista de que el concentrado de cobre que llega de Toquepala no es suficiente para mantener la operación”, dice un comunicado.
La minera detalló que la mina Cuajone aporta 7% de la producción nacional de cobre, lo cual representa US$ 4,8 millones diarios en exportaciones perdidas; así como S/ 2,3 millones de canon y regalía mineras para la región Moquegua.
Por otra parte, el desabastecimiento de agua potable se agudiza en perjuicio de 5.000 pobladores del campamento minero de Cuajone tras la interrupción del suministro.
En tal sentido, Southern Perú desmintió versiones de dirigentes, respecto a que la propia empresa ha cortado el suministro del recurso hídrico y que la compañía dispone de otra línea de conducción.
Cuajone cuenta con dos centros poblacionales: Villa Cuajone y Villa Botiflaca. Estos disponen de tres tanques de agua. Uno de 500.000 galones que abastece a Villa Botiflaca, otro de 80.000 galones para el funcionamiento del hospital y un tercero de 150.000 galones para atender a la población de Villa Cuajone, los cuales no pueden operar desde que se inició el bloqueo por parte de los comuneros.
En su lugar la compañía comunicó que instaló tanques “estacionarios” (Rotoplas) para proveer de agua a los residentes.
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