Al menos 42 personas murieron, entre ellos 10 menores de edad, en un nuevo ataque aéreo que ejecutó el Ejército israelí en la ciudad de Gaza, donde tres edificios quedaron destruidos durante la jornada de este domingo.
De acuerdo con el Ministerio de Salud de Palestina, con este nuevo bombardeo la cifra de palestinos muertos aumentó a 192, entre los que se encuentran 58 menores de edad, pese a que aún no oficializan algunos decesos. En tanto, el número de heridos reportados se elevó a 1.200.
Por su parte, Israel ha confirmado la muerte de 10 de sus ciudadanos, entre ellos dos niños. A pesar del devastador panorama, los israelíes planean seguir con los ataques en los próximos días teniendo como punto principal de ataque la ciudad de Gaza.
En virtud de ello, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu declaró que los enfrentamientos seguirán pese a los esfuerzos internacionales por lograr un cese del fuego. En un discurso televisado, dijo que los ataques continuaban con “toda su fuerza” y que “tomarán tiempo”. “Israel quiere imponer un alto precio a Hamás”, agregó. Estos han sido los peores combates desde la cruenta guerra de 2014 en Gaza.
“No he visto semejante nivel de destrucción en mis 14 años que tengo trabajando aquí”, comentó Samir al-Khatib, funcionario de rescates en Gaza. “Ni siquiera en la guerra del 2014”, explicó.
En respuesta, el grupo militante Hamás también siguió sus ataques, usando zonas civiles de Gaza para disparar cohetes contra similares dentro de Israel, donde bombardeó una concurrida calle de edificios residenciales y negocios, cinco minutos después de la medianoche del domingo.