“La verdad importa”: funcionario de Georgia al que Trump presionó en elecciones
Donald Trump llamó al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, para pedirle que “busque” los votos necesarios para anular la victoria del demócrata Joe Biden.
El secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, dio su versión tras el escándalo provocado por la filtración de un audio donde se le escucha al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presionarlo para que “encuentre” más votos a su favor en las últimas elecciones del 3 de noviembre, según la grabación difundida por The New York Post.
Raffensperger sostuvo al programa Good morning America de ABC que sólo estaba cumpliendo la ley cuando rechazó las pretensiones del todavía mandatario Donald Trump —su compañero republicano—, quien aseguraba que su derrota electoral fue producto de un fraude.
“¿Consideró que era una petición legal cuando el presidente le pidió que encontrara los votos?”, le preguntaron a Raffensperger.
“No soy abogado. Todo lo que sé es que vamos a seguir la ley, seguir el proceso. La verdad importa, y hemos estado luchando contra estos rumores durante los últimos dos meses”, respondió el funcionario, no sin antes señalar que la Casa Blanca lo había presionado, en contra de su criterio, para que atendiera la llamada de Trump.
Como principal funcionario electoral de Georgia, Brad Raffensperger supervisó innumerables recuentos de las votaciones del 3 de noviembre, de los cuales llegó a una sola conclusión: los ciudadanos del estado en cuestión habían favorecido por primera vez al candidato presidencial demócrata, Joe Biden.
Después de rechazar durante varias semanas las acusaciones infundadas de fraude de Donald Trump, el titular de Georgia le dijo al presidente en la llamada del sábado 2 de diciembre que la votación mostró que Biden era el ganador legítimo.
“Bueno, señor presidente, el problema que tiene es que los datos que tiene son erróneos”, se le escucha a Raffensperger enfatizándole a Donald Trump en la grabación de la llamada compartida por el medio The Washington Post.
