El panorama económico del Perú se enfrenta a un nuevo desafío, con las elecciones generales de 2026 a la vuelta de la esquina. En este contexto, el presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), Julio Velarde, compartió su perspectiva sobre la inversión privada durante la Investor Conference 2024 de Credicorp Capital, celebrada el 25 de septiembre. Velarde destacó que, si bien el país podría experimentar un freno en las inversiones para 2025, este no se compararía con los efectos devastadores observados en la administración de Pedro Castillo.
Las palabras de Velarde se enmarcan en un momento crítico, donde las tensiones políticas y las expectativas económicas juegan un papel fundamental en la toma de decisiones de los inversores. A pesar de las adversidades pasadas, Julio Velarde se mostró optimista respecto a la capacidad del Perú para mantener su estabilidad económica. "El escenario que veo probable es que habrá un freno de inversiones (en 2025), pero no creo que sea tan importante", señaló, ofreciendo un alivio ante los temores de un colapso similar al vivido anteriormente.
El factor que podría contribuir al freno de inversiones es el contexto económico global. Velarde mencionó que las proyecciones de crecimiento de la inversión privada se han ajustado, situándose en un 2,3% para el 2025. La incertidumbre económica a nivel internacional, incluyendo posibles crisis financieras y fluctuaciones en los precios de los commodities, puede influir en la decisión de los inversores de apostar por el Perú. Sin embargo, se espera que para el siguiente año la inversión privada se eleve al 4,1%, impulsada por el inicio de la construcción del proyecto minero Tía María, lo que podría ofrecer un alivio en medio de la incertidumbre.
Al analizar las razones detrás del posible freno de inversiones, el presidente del BCRP recordó la experiencia de la gestión del expresidente Pedro Castillo, que estuvo marcada por la salida más significativa de capitales en la historia de Perú.
"El país soportó la salida de capitales más grande de su historia", explicó, destacando que, a pesar de esta situación, la economía no se hundió, lo que evidencia la fortaleza macroeconómica del Perú. “Espero que no se repita [las consecuencias del Gobierno de Pedro Castillo]. Fue una prueba de estrés tremenda", agregó, enfatizando la resiliencia del sistema económico.
Programa 'Mi Carrera'. Foto: Andina
Además de los aspectos económicos, Velarde también abordó la preocupante tendencia de la salida de profesionales del país en busca de mejores oportunidades en el extranjero. "No sorprende realmente, pero mientras no haya optimismo, muchos jóvenes quieren irse. Es una preocupación fuerte", comentó el presidente del BCR. Este fenómeno puede tener un impacto significativo en la capacidad del país para atraer inversiones, ya que la fuga de capital humano puede limitar el desarrollo de un entorno empresarial dinámico y competitivo.
Las elecciones de 2026, junto con el contexto de incertidumbre política, pueden influir en la percepción de los inversores respecto a la estabilidad económica del Perú. Velarde reflexionó sobre las elecciones de 2021, que se caracterizaron por una polarización extrema, exacerbada por la tensión entre el Congreso y el Ejecutivo y las consecuencias no resueltas de la pandemia de COVID-19. "Afectó esta lucha política interna entre el Congreso de la República y el Ejecutivo", explicó, sugiriendo que la fragmentación de los partidos políticos ha dificultado la toma de decisiones coherentes y efectivas para la economía.