Con información de Luis Coello
Decenas de ciudadanos y trabajadores de Petroperú marcharon en Talara para cuestionar las recientes acciones del Congreso y del Poder Ejecutivo en torno a la empresa estatal: el congresista Alejandro Cavero busca privatizarla y la gestión de Dina Boluarte ya no le entregará directamente los lotes I, VI y Z-69, sino que lanzará un concurso público ante la presión de los gremios empresariales.
Elder Ruiz, gerente corporativo de la Nueva Refinería de Talara (NRT), señaló que Petroperú “es de todos los peruanos” y trabajarán para recuperar los lotes hasta llegar, incluso, a participar en la venta a través de grifos, por lo que esperan el respaldo civil, en especial, de las autoridades de Talara.
Por su parte, Arturo Rodríguez, gerente del departamento Proyecto Refinería de Talara, aseguró que Petroperú tiene la capacidad y competencia para gestionar los lotes y la NRT, como lo viene demostrando el Estado en el Lote I —temporalmente desde hace dos años—. “Estamos listos para fortalecer la integración vertical que redundará en beneficio para todos”, manifestó.
Respecto a la iniciativa de Alejandro Cavero para privatizar Petroperú, consideran que está plagado de “incoherencias”. “Dicen que Petroperú está quebrado, pero al día siguiente quieren comprar acciones. Si no vale nada Petroperú, ¿para qué la quieren? Solo buscan canibalizar Petroperú por intereses económicos”, manifestó Johnny Villón, secretario general del Sindicato Nacional de Profesionales de Petróleos del Perú.
Manuel Mendoza, veterano sindicalista talareño, argumenta que están frente a un problema político que viene del Congreso, por lo que es clave movilizarse para “poner las cosas en su sitio”. “Por 50 años luchamos contra la Brea y Pariñas, para que Fujimori llegue y rompa el esquema de 2 a 1: por un barril en proceso, dos estarían en reserva”, anotó.
Finalmente, Luis Querevalú, representante del Sindicato Nacional Unificado de Trabajadores Empleados y Administrativos de Petróleos del Perú, puntualiza que los lotes I, VI y Z-69 que temporalmente asumirá Petroperú por dos años "tras el giro entreguista de Boluarte" —para después pasar a licitarse— tendrá ganancias netas por US$250 millones anuales.
“Ellos (los privados) han tenido la renta petrolera, incluso cuando el barril llegó a costar 140 dólares. Se beneficiaron en desmedro de la economía. No hubo inversión social en Talara. Alegaban que con la privatización habría incremento de reservas, producción y puestos de trabajo, pero no se ha dado nada. Bajamos de 140 mil barriles diarios a 35 mil. Se precarizó el empleo con tercerizados”, objetó.