El sector manufacturero de Estados Unidos se contrajo en febrero por las importaciones, los precios, la producción y los pedidos.
Luego de un alza marcada en enero, la primera en meses, el índice ISM manufacturero perdió 0,8 puntos porcentuales con relación a enero, y se situó en 50,1%.
Este nivel está apenas por encima del 50%, que separa el crecimiento de la contracción.
Este sería el crecimiento más débil de la industria manufacturera registrado en seis meses, debido a alteración en las cadenas de suministros que golpeó tanto la producción como los nuevos pedidos, afectados por el coronavirus.