El primer discurso de Christine Lagarde como jefa del Banco Central Europeo (BCE) estuvo dedicado a elogiar al exministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, y dejó decepcionados a los mercados que esperaban pistas sobre la política económica.
“Este evento no es sobre el BCE. No se trata de política monetaria u otras políticas económicas. Se trata de ti, Wolfgang”, declaró de entrada en un discurso pronunciado por la tarde en Berlín, después de que Schäuble hubiera recibido un premio de manos de editores de la prensa alemana.
“Primera decepción para los mercados”, reaccionó en Twitter Carsten Brzeski, economista de ING Bank. “El discurso elogioso a Wolfgang Schäuble ha sido lo que debía ser: un discurso elogioso”, y no dejó vislumbrar nada sobre “una hoja de ruta para la política monetaria del BCE en las próximas semanas. Qué sorpresa...”, añadió.
Schäuble, defensor de la política de austeridad, fue el arquitecto de la estricta política presupuestaria alemana de no acumular nuevas deudas, pese a las súplicas de otras capitales de la Unión Europea para incrementar el gasto público.
Alemania fue también uno de los países que se opuso a las medidas de estímulo del BCE en los últimos años, bajo el argumento de que sus tasas récord de bajo interés y crédito barato perjudicaban a los ahorradores alemanes.
La francesa alabó el “rigor intelectual” de Schäuble que comprendió, según Lagarde, que “la unión monetaria que incluye a diferentes Estados soberanos solo puede ser duradera si existe una confianza mutua”.
En su anterior cargo como jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI), Lagarde se unió a menudo a los llamados para que Alemania gastara e invirtiera más, pues así ayudaría a impulsar el crecimiento de la eurozona.
AFP