Farid Matuk - Exjefe del INEI
Es una crisis entre dos élites que para el ciudadano de a pie no le va ni le viene en términos económicos, pero en el político es importante. En términos económicos, la economía se desacelera desde diciembre del año pasado y seguirá así hasta el primer trimestre del otro año. El dólar está estancado, la falta de empleo va a continuar, el crecimiento es magro. ¿Novedades? Las mismas novedades de todos los días. No habrá nada pésimo.
En el mundo real no va a pasar gran cosa, los que anuncian los apocalipsis deben hacerse responsables porque en anuncios previos nada ocurrió. Vizcarra es proempresario, promodelo, la Ley de Promoción Agraria ha sido santificada por el Ejecutivo, entonces los empresarios deben estar tranquilos porque el presidente es promodelo.
En el tema del dólar, lo que tenemos son especuladores que quieren aprovechar una circunstancia cierta, pero algo que no ocurre todos los días. Todo va a ir tan mal como antes, pero no peor. Es el mensaje tranquilizador.
El dólar va a seguir estancado. El Banco Central de Reserva tiene todos los dólares del mundo para comprar todo el dinero que hay en el Perú y le sobra. No hay manera humana posible de que el dólar se dispare, el BCR decide el precio del dólar y está en función a la inflación en EEUU, el tipo de cambio del euro, la guerra comercial en China, pero no por factores domésticos.
Desde mediados de los 90, el sol es como el euro, los que han vivido la etapa anterior; el dólar subía el doble ahora no, está entre S/ 2,50 y S/ 3,50 estancado desde hace 25 años. Va a oscilar pero como siempre. La cosa va a ir mal como venía mal desde diciembre hasta el primer trimestre del 2020 porque estamos en fase de bajada, que hay cada tres años. Tenemos para unos 8 meses más de bajada. (El PBI) puede llegar al 2%, el 2,75% del BCR es optimista, es la realidad, pero no es producto de la crisis.
Armando Mendoza - Economista
No espero un impacto significativo, al menos en el corto plazo, quizás en el mediano y largo plazo se pueda ver algún impacto si es que esta crisis no se resuelve mediante una nueva convocatoria de elecciones y el establecimiento de un nuevo Congreso, pero en el corto plazo el Perú seguirá avanzando.
Estamos en un tema de especulación de hipo, de jugadas que pueden ganarse alguito, pero desde hace tres años ha habido tantas situaciones en las que se disparó el dólar. Hemos tenido una lección en el 2016, que había incertidumbre de quién ganaba, luego el proceso de PPK con los dos intentos de vacancia, un expresidente que se suicidó, pero el dólar se mantiene.
No es que la economía peruana esté en una fase boyante, pero su capacidad de ignorar este ruido político está funcionando.
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Llegar a un 2,7% este año es optimista, más allá del análisis técnico también hay un factor político. A nadie le gusta dar malas noticias, todo indica que vamos a seguir en esta fase de estancamiento. El Gobierno no ha tenido la capacidad de desarrollar políticas contracíclicas. Hace algunos meses, el ministro Oliva decía que se viene un shock de inversiones, pero no hay rastro. Los datos del INEI indican que la inversión pública está estancada, y eso es lo que debería impulsar la reactivación de la economía.
No hay la capacidad de salir de esa barrera, de que la gran inversión pública y privada será la que reactivará la economía, hay que entrar a expandir el gasto, meter dinero en los programas sociales, no hay esa capacidad.
Ahora tenemos medio millón adicional de personas buscando trabajado y nadie dice nada de cómo se encara cuando hay personas que están buscando sobrevivir, la crisis política es solo ahora la cereza del postre. Los problemas de la economía peruana ya tienen tiempo y este gobierno y los anteriores no han tenido la capacidad de solucionar