Polonia es uno de los pocos países en los cuales los hinchas tiene permitido ingresar a los estadios tras la reanudación de la liga local. Lamentablemente, la conducta de un grupo de ellos viene dejando mucho que desear, pero no porque estén incumpliendo las medidas sanitarias para evitar los contagios de coronavirus, sino porque durante el último clásico desplegaron un desafortunado mosaico con la imagen del exnarcotraficante colombiano Pablo Escobar.
La autoría de este reprobable hecho fue de miembros radicales de la barra del Lech Poznan, quienes amenazaron a los jugadores de su propio equipo con el mensaje “Pelota o muerte”, un parafraseo de una de las líneas más famosas del excapo del narcotráfico.
Las fotografías y videos subidos a las redes sociales muestran cómo los seguidores del conjunto ‘ferroviario’ no solo aprueban la presencia de la imagen en el estadio, sino que además entonan cánticos para exhortar a sus futbolistas a vencer a su clásico rival, el Legia Varsovia.
Para los ultras, este era un partido que debían ganar de todas formas, pues en caso de no hacerlo, el equipo contrario hubiera terminado proclamándose campeón frente a ellos. Con solo cuatro partidos para el final de la temporada, un empate habría bastado para que la ventaja de once puntos de los ‘militares’ sea insalvable.
Al margen de lo sucedido, Lech Poznan terminó imponiéndose por dos goles a uno, gracias a las anotaciones de Kamil Jozwiak y Jakub Kaminski. No obstante, el triunfo solo le permitió al Poznan acortar distancias con el cuadro de la capital, que aún le lleva ocho puntos y se sitúa líder de la clasificación.
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