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Una revolución llamada Johan Cruyff

En el cumpleaños del mítico número 14 de la ‘Naranja mecánica’, recordamos al jugador que lo cambió todo con su ‘Fútbol total’.

Un día como hoy, Johan Cruyff hubiera cumplido 73 años de una vida dedicada al fútbol. Una trayectoria dedicada no solo a jugar mundiales, ganar campeonatos o brillar en los mejores campos del mundo, sino también a cambiar esta disciplina para siempre, para convertirlo verdaderamente en el deporte más hermoso del mundo.

El talento no es suficiente, esta es una realidad comprobada en el fútbol. Si a las cualidades natas de un futbolista le sumamos rigor táctico y constante entrenamiento, podemos obtener un ‘crack’. Pero Johan Cruyff le sumó algo más, un obsesivo estudio por el juego para entenderlo a la perfección.

El resultado se califica tanto en el ámbito cuantificable, con 20 títulos en Ajax, dos con Barcelona y una final del Mundial 1974, como en el netamente subjetivo, en ese apartado, Cruyff era simplemente exquisito. Y eso que solo hablamos de su carrera como jugador.

Pero, por qué se considera a Cruyff un revolucionario. La frase ‘Fútbol total’ lo resume todo. En tiempos en que el talento individual era lo que dominaba el juego, el holandés se convirtió en símbolo de un estilo de juego que hoy en día se ha convertido en regla para todo equipo que busca ser competitivo.

La idea que en estos tiempos parece sencilla, en ese entonces produjo un cambio absoluto. Consiste en que si un jugador se mueve de su posición, un compañero lo sustituye para que el equipo mantenga su formación táctica. A esto se le suma posesión del balón, presión sobre la salida del rival y una fluida triangulación de pases hasta llegar al arco contrario.

Sistema perfeccionado por Rinus Michels en Ajax y hecho famoso con Johan Cruyff como emblema, tanto en ese club como en la selección holandesa. El primer jugador reconocido como ‘todo terreno’ también daba muestras de una gambeta endemoniada y una gran capacidad goleadora. Motivos suficientes para ser considerado uno de los mejores de la historia del fútbol.

Un penal científico

Pero como ya mencionamos, el estudio del juego y el conocimiento del reglamento para aprovechar todo detalle disponible eran un plus de Cruyff. Es muy recordado aquel penal de 1982 cuando jugaba por el Ajax ante el Helmond Sport. En lugar de ejecutar un disparo, tocó el balón hacia un costado para que Jesper Olsen se la devuelva y solo tenga que empujar el esférico al fondo del arco. Una ejecución que se imitó en el futuro con buenas y malas consecuencias.

"El árbitro, después del penalti, me dijo: '¿Qué has hecho? ¿Eso es válido?'. Yo le dije que sí, que el balón siempre fue por delante, que no había fuera de juego. Lo dio por bueno, claro", indicó Cruyff.

Son cientos de historias, jugadas, goles y campañas que podríamos relatar sobre Cruyff, pero hoy nos limitamos a saludar a aquel jugador que partió hace 4 años dejando un legado imborrable y a quien le debemos mucha de esta pasión que hoy vivimos por el deporte rey.