El huevo frito puede ser una de las meriendas más sencillas de preparar, ya sea para el desayuno, el lonche o como acompañamiento de un platillo en particular. Sin embargo, tal vez podrías estar arriesgando tu salud al prepararlo de manera errónea.
PUEDES VER: ¿Sabías que los perros no ladran a los vehículos por diversión? Conoce la verdadera razón
Platos peruanos como tallarines verdes, arveja partida, puré y más suelen estar acompañados por huevo frito, mientras que otros como el arroz a la cubana también incorporan este alimento en su composición. Es por ello que, a continuación, explicamos cuál es el riesgo de romper los huevos en el borde de la sartén y cómo podrías freírlo correctamente.
Aunque el huevo se encuentra presente en meriendas y platillos principales, debes tener en cuenta que este alimento podría poseer la bacteria de Salmonella. Las gallinas y más aves de corral son portadoras de este microbio, por lo que en ocasiones sus huevos también se propagan de este.
En ese sentido, al romper un huevo directamente en el borde de la sartén podría provocar que parte de esta bacteria contamine la comida y posiblemente el plato, pues incluso el interior del huevo podría contaminarse.
A manera de prevención, especialistas recomiendan lo siguiente:
Romper los huevos en la sartén no es saludable, según especialistas. Foto: Nius
PUEDES VER: ¿Por qué no se debería separar a los perros que se quedan ‘pegados’ después de aparearse?
Si hasta la fecha tenías la costumbre de romper un huevo en la sartén, especialistas recomiendan dejar de hacerlo, pues podría considerarse peligroso. Una manera opcional y segura de hacerlo es precisamente romper el huevo en una superficie plana como el módulo de la cocina o alacena mediante un golpe duro.
Tras ello, con tus dedos deberás terminar de romper el huevo hasta que el interior de este caiga en la sartén sin la necesidad de tener un contacto directo entre el utensilio y la cáscara de huevo.
Especialistas de la salud recomiendan romper los huevos en una superficie y no en los utensilios. Foto: Blog Zopencas en la cocina