El 19 de marzo, la ley SB4 fue implementada en el estado de Texas, en Estados Unidos. Como resultado, se generó una ola de debates y polémicas. Esta legislación otorga nuevas facultades tanto a las fuerzas policiales como a ciertos jueces dentro del estado. Con la entrada en vigor de esta normativa, se habilita a determinados jueces proceder con la deportación de personas migrantes que se encuentren en situación irregular hacia México. Además, se autoriza a los oficiales de Policía efectuar detenciones basadas meramente en la sospecha de que un individuo pueda tener un estatus migratorio ilegal.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, desempeñó un papel crucial en la promoción de la ley SB4 y, tras varias postergaciones, finalmente fue la Corte Suprema de Estados Unidos quien autorizó su implementación. Esta legislación confiere a las fuerzas policiales de Texas amplias facultades para llevar a cabo detenciones y arrestos de individuos que, a juicio de los oficiales, sean sospechosos de residir en el país de forma ilegal.
Una vez detenida, la persona será presentada ante un juez y, si no dispone de documentos que acrediten su estancia legal en el país, podría enfrentarse a la medida de ser deportada a México. Las autoridades policiales del estado fronterizo de Texas sostienen que esta acción es imprescindible para gestionar el aumento en el flujo de migrantes indocumentados que ingresan a Estados Unidos cruzando la frontera.
Son miles de migrantes los que día a día intentan cruzar la frontera hacia Estados Unidos. Foto: CuartoOscuro
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Las fuerzas policiales y las autoridades migratorias en Texas han etiquetado el voluminoso flujo de personas migrantes que entran al país a través de dicho estado como una "crisis". El gobernador Greg Abbott, quien ha sido un ferviente defensor de esta ley, ha descrito la situación como una "invasión de migrantes". Sin embargo, tanto la ley SB4 como su implementación han sido objeto de críticas. Se las considera como violaciones significativas a los derechos humanos y acusaciones de prácticas discriminatorias por parte de las autoridades.
La administración de Joe Biden ha interpuesto una demanda con el objetivo de invalidar la ley SB4 al argumentar que una normativa estatal no puede contravenir la legislación federal. Adicionalmente, se señala que la aplicación de esta norma podría perjudicar las relaciones internacionales con México y provocar confusión en la implementación de la legislación migratoria pertinente.
Existe un desacuerdo notable entre el presidente de Estados Unidos y el gobernador de Texas respecto al alcance territorial que las autoridades texanas pueden patrullar cerca de la frontera con México. Además de estas acciones, Texas ha anunciado el inicio de la construcción de un muro fronterizo, con el propósito de proteger su territorio del ingreso de personas migrantes. Este proyecto contará con un presupuesto de 1.500 millones de dólares.
Según el plan de financiamiento, cada segmento de 1,6 kilómetros del muro será construido con un presupuesto estimado de entre 20 y 30 millones de dólares, fondos que serán obtenidos de los impuestos pagados por los residentes de este estado sureño.