Laurentino ‘Nito’ Cortizo, actual presidente de Panamá, es aquejado por una enfermedad de la que pocos conocen, pero que hizo temer a muchos que no pudiera terminar su periodo de gobierno. El mandatario de 69 años, conocido por iniciativas como el Vale Digital, pudo conocer su diagnóstico en junio de este año.
Todo comenzó a finales de mayo de 2022, cuando el jefe de Estado se sometió a un examen de sangre que arrojó una disminución en su hemoglobina y en su conteo de glóbulos blancos.
El 20 de junio de 2022, Laurentino ‘Nito’ Cortizo reveló públicamente que padece de un síndrome mielodisplásico de riesgo intermedio. Esta enfermedad, que es un tipo de cáncer, le fue diagnosticada por los reconocidos doctores José Luis Franceschi y Ricardo Díaz cuatro días antes.
Fue el doctor de cabecera del mandatario, Héctor Sánchez, quien le recomendó acudir a estos especialistas tras conocer los resultados de su examen de sangre. Ellos consideraron adecuado realizar una aspiración y biopsia de la médula ósea; las muestras tomadas fueron enviadas a un laboratorio especializado en los Estados Unidos.
Tuit de Laurentino Cortizo en el cual anunciaba que tiene síndrome mielodisplásico. Foto: NitoCortizo / Twitter
Pese a este anuncio, los doctores advirtieron que “el examen físico del señor presidente es normal y goza de un Estado general excelente”. Tras ello, los galenos recomendaron una segunda evaluación con exámenes de biología molecular en Houston, Texas.
El sábado 9 de julio, la primera dama Jazmín Colón de Cortizo reveló en un audio que la mielodisplasia de ‘Nito’ era de bajo riesgo.
“En el examen anterior, ustedes se acuerdan que los blastos, las células malignas, eran de 5% al 9%. En este caso, con el examen detallado acá, es de 2% al 3% lo cual es un pronóstico muy bueno”, sostuvo entonces Colón, citada por la agencia EFE, que comprobó la autenticidad de la grabación con una portavoz del Gobierno panameño.
Con este diagnóstico actualizado, el jefe de Estado panameño “tiene tres alternativas, las cuales hay que evaluar a profundidad porque falta el 20% de los exámenes por llegar: uno, que siga sin tratamiento, otra es unas inyecciones y el tercero es unas pastillas de baja dosis que son muy buenas”, de acuerdo con la primera dama.
Cada seis meses, Cortizo se somete a exámenes rutinarios y completos de sangre, según indican fuentes oficiales.
Un síndrome mielodisplásico (MDS) es una alteración que puede suceder “cuando las células productoras de sangre en la médula ósea se convierten en células anormales. Esto provoca que bajen los recuentos de uno o más de los tipos de células en la sangre”, según la American Cancer Society. Este mal se considera como un tipo de cáncer.
En un síndrome mielodisplásico, las células madre sanguíneas de la médula ósea no se transforman en glóbulos rojos, blancos ni plaquetas, sino en células sanguíneas inmaduras. Foto: Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos
En uno de cada 3 pacientes, el MDS puede progresar y volverse un cáncer de rápido crecimiento de las células de la médula ósea, conocido como leucemia mieloide aguda. En el pasado, se le conocía como preleucemia o leucemia quiescente.
Un síndrome mielodisplásico no suele presentar síntomas. Los más comunes y que requieren atención médica son los siguientes, según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos:
Aspecto de las células anormales en el síndrome mielodisplásico. Foto: UNIR