A Joey King seguramente la conociste en “El stand de los besos” de Netflix. Su carrera ha tomado impulso y recientemente actuó para “Tren bala”, la película de acción que reúne en su reparto a Bad Bunny y Brad Pitt. Sin embargo, más allá de las comedias románticas y explosivas escenas, la artista participó en una retorcida serie de TV llamada “The act”, en la cual expuso la inquietante historial real de Gypsy Rose.
Si bien la producción se estrenó en el 2019, los hechos captaron la atención de los medios en 2015. Miles de personas quedaron impactadas no solo por un inesperado asesinato, sino por un mensaje en Facebook que dejó en evidencia el crimen: “Esa perra está muerta”.
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Antes, un poco de contexto. Dee Dee Blanchard se había casado y producto del amor nació Gypsy Rose. El matrimonio no funcionó y la señora se separó de su esposo, por lo cual quedó al entero cuidado de su hija. En ese momento inician los problemas.
A pesar de que la pequeña nació completamente sana, Blanchard empezó a criarla como una bebé de salud delicada. Esto es un fenómeno que tiene nombre propio: síndrome de Munchausen por poderes; es decir, una persona miente diciendo que otra persona sufre enfermedades para engañar al resto.
Así, Dee Dee había hecho creer a todos que Gypsy era paciente de cáncer e incluso le suministraba medicamentos que, por obvias razones, no necesitaba. Sin embargo, Rose pronto descubrió la verdad detrás de su vida: jamás estuvo enferma y su madre se había convertido en su ‘carcelera’.
A medida que se hacía mayor, Gypsy ya no quería seguir con la farsa de su madre, por lo que esta empezó a usar la violencia para que le haga caso. Foto: Greene Country Sheriff’s Office
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Gypsy Rose tenía acceso a internet y de ese modo conoció a un muchacho, identificado como Nicholas Godejohn. Ambos se enamoraron, pero Dee Dee era el impedimento que no dejó prosperar su relación. Por ello, la joven intentó escapar en más de una oportunidad, pero no lo logró.
El día de su ‘liberación’ llegó en junio de 2015. Gypsy ordenó a Godejohn que asesinara a su progenitora, para que puedan vivir juntos y su deseo se volvió realidad. Aquel día, Dee Dee Blanchard fue hallada muerta y su hija fue declarada como desaparecida.
El misterioso caso entonces se convirtió en todo un escándalo mediático de parricidio. “Esa perra está muerta” fue el mensaje en el Facebook de Blanchard que inició las investigaciones y terminó con la captura de los culpables.
De acuerdo con la revista Time, el 5 de julio de 2016, Gypsy Rose fue sentenciada a 10 años de prisión por asesinato en segundo grado. En tanto, Nicholas Godejohn fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por asesinato en primer grado.
Por el momento, la serie con Joey King y Patricia Arquetter solo se puede ver a través de Apple TV+ en Latinoamérica. En Estados Unidos, está disponible por Amazon Prime Video y Hulu.