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Ciencia

Abismo Challenger: dónde queda y por qué es más alto que el Monte Everest

Incluso si lo comparamos con el monte Everest, el abismo Challenger seguiría ganándole en dimensión a la montaña más alta del planeta.

El abismo Challenger tiene una profundidad de más de 10.000 metros bajo el nivel del mar. Foto: IA

Cuando pensamos en el punto más alto del planeta, rápidamente nos llega a la mente el monte Everest, ubicado en la cordillera del Himalaya. Y claro, si tomamos en cuenta sus 8.848 metros sobre el nivel del mar, es sin lugar a dudas la montaña terrestre más alta de la Tierra. Sin embargo, existe un lugar que, si lo comparamos con el monte ubicado en Asia, terminaría ganándole en dimensión: se trata del abismo Challenger.

Lo interesante del abismo Challenger es que, a diferencia del Everest, aún no se ha llegado a conocer al 100%; por ello, hasta hoy en día sigue siendo el objeto de constantes expediciones que establecen nuevos récords en viajes submarinos y revelan información valiosa sobre las profundidades del planeta Tierra.

¿Dónde queda el abismo Challenger?

El Abismo Challenger, el punto más profundo conocido de la Tierra, está ubicado en la fosa de las Marianas, en el océano Pacífico occidental, al este de Filipinas. Además, tiene una profundidad que supera los 10.000 metros, una diferencia de más de 1.000 metros con la altura del monte Everest.

El abismo Challenger está ubicado dentro de la fosa de las Marianas. Foto: Concepto

¿Por qué es considerado el punto más profundo del planeta?

Como ya se ha mencionado, el abismo Challenger tiene una profundidad extrema de más de 10.000 metros. Esta peculiar e impensable característica geográfica se destaca por su ubicación en la fosa de las Marianas, lugar donde dos placas tectónicas convergentes se están separando constantemente, lo que origina que la corteza oceánica se hunda cada vez más en el manto terrestre y fomer la profunda fosa.

La Fosa de las Marianas es más profunda en comparación a la Fosa de Puerto Rico y hasta al Monte Everest. Foto: The Five Deeps Expedition | BBC

¿Hay vida en la fosa de las Marianas?

La respuesta es sí, hay vida en la fosa de las Marianas, incluyendo diversas formas de vida marina adaptadas a las condiciones extremas de presión y oscuridad que caracterizan estas profundidades.

Aunque la presión en las profundidades de la fosa de las Marianas es extremadamente alta y la falta de luz solar puede hacer que parezcan inhóspitas, aún se encuentran organismos vivos allí.

Estos incluyen bacterias, protistas, peces abisales, y otras criaturas adaptadas a vivir en entornos extremos. Por ese motivo, los científicos continúan explorando estas profundidades para comprender mejor cómo estas formas de vida sobreviven y prosperan en un ambiente tan desafiante.

Medusa hallada en la Fosa de las Marianas. Foto: NOAA Oficina de OER

¿Por qué la fosa de las Marianas fue designada monumento nacional de EE. UU.?

La fosa de las Marianas fue designada Monumento Nacional Marino de los Estados Unidos principalmente para proteger su rica biodiversidad y su ecosistema único; debido a que esta área alberga una gran variedad de vida marina, incluyendo especies endémicas y otras adaptadas a las condiciones extremas de profundidad y presión.

Su designación como monumento nacional en el 2009 también buscó preservar los aspectos geológicos y oceanográficos de la región, así como fomentar la investigación científica y el estudio de este ecosistema marino profundo. Además, se pretende conservar y proteger los recursos culturales y arqueológicos asociados con la región, que incluyen restos de naufragios y sitios históricos.

¿Por qué James Cameron viajó a lo profundo de la fosa de las Marianas?

James Cameron viajó a lo profundo de la fosa de las Marianas para explorar y filmar el lugar más profundo del océano. Su expedición, conocida como la "Inmersión Challenger Deep", tenía como objetivo investigar y documentar la vida marina y las características geológicas de esta región poco explorada de la Tierra. Cameron es un cineasta y explorador apasionado por el océano, y su interés en la exploración de las profundidades marinas lo llevó a emprender esta desafiante expedición.