Un equipo de arqueólogos de la Academia China de Ciencias Sociales (CASS) encontró en ese país un inodoro con sistema de descarga de agua, probablemente el más antiguo jamás descubierto.
Los investigadores se toparon con este artefacto avanzado para su época mientras excavaban dos grandes edificios en las ruinas del palacio de la ciudad de Yueyang, provincia de Shaanxi.
De acuerdo con los expertos, se estima que el retrete tiene entre 2.200 y 2.400 años (entre el periodo de los reinos combatientes hasta el comienzo de la dinastía Han).
El hallazgo ha desconcertado a historiadores y arqueólogos, ya que se creía que los inodoros modernos se inventaron en 1596, en Inglaterra.
La fascinante reliquia consta de dos partes: un inodoro interior sobre una plataforma y un sistema de tuberías debajo que dirigía las aguas residuales al exterior del edificio.
Solo se logró reconstruir la mitad del retrete porque faltaban piezas de la parte superior.
Fan Mingyang, un experto en diseño de herramientas antiguas, indicó al diario Global Times que el inodoro es "engañosamente avanzado", ya que tiene un sistema de drenaje de agua similar al de los baños modernos.
Por su parte, Liu Rui, miembro del equipo de excavación, explicó al medio estatal China Daily que este "objeto de lujo" probablemente solo habría sido utilizado por miembros del alto rango del palacio.
"Es el primer y único inodoro con descarga de agua que se ha descubierto en (un sitio arqueológico de) China", declaró Liu al periódico.
Liyang, donde se realizó la excavación, fue la capital de la dinastía Qin durante más de 30 años.