Mauricio Ochmann no solo se roba el corazón de Victoria Ruffo en la ficción de la telenovela Victoria (una historia de amor entre un hombre joven y una mujer mayor que transmite ATV a las ocho de la noche), sino de cientos de fans que le siguen los pasos. •• El guapo y encantador "Gerónimo" conversó con Fama y nos abrió su corazón •• A sus 30 años, confiesa que al fin superó su adicción a las drogas Jannina Eyzaguirre V. (Comunicación telefónica con Colombia). Mauricio Ochmann no solo se roba el corazón de Victoria Ruffo en la ficción de la telenovela Victoria (una historia de amor entre un hombre joven y una mujer mayor que transmite ATV a las ocho de la noche), sino de cientos de fans que le siguen los pasos. El actor mexicano de cautivadora sonrisa conversó con Fama, por vía telefónica, sobre su personaje y también sobre el problema que tuvo con las drogas. "Gracias a Dios eso quedó atrás y ahora estoy del otro lado", confió. -¿Cómo es tu personaje en Victoria? -Gerónimo es joven con la sabiduría interior de un anciano. Sus intereses y metas están ligados al amor. Detesta el egoísmo, tiene un gran sentido del humor y es muy libre. -¿Cómo te llevas con tus compañeros de elenco? -Es uno de los equipos más bonitos en los que me ha tocado trabajar. Victoria Ruffo es una gran mujer. Adoro a Diana Quijano, es una excelente actriz. Con ella hemos hecho escenas muy divertidas. Todos son de primera. -¿Tienes predilección por algún tipo de personaje? -Me gusta cada uno de los personajes en la etapa y tiempo que se han dado. Por ejemplo, ahora me gusta "Gerónimo". En general, me agradan los seres humanos, que no sean tan buenos ni tan malos, porque si no la gente no se identifica con ellos. -¿Te fastidiaría que te encasillaran como el galán de las novelas? -No me fastidia. A lo mejor algunos me han conceptualizado así, pero yo he hecho muchos trabajos en cine y televisión. En el caso de "Gerónimo", este personaje no es precisamente un galán sino un antigalán. No es el Ken de la Barbie, es más bien un hippie de la época actual con sentimientos humanos y sociales. Es un personaje muy interesante. -¿Por qué dejaste el protagónico de la telenovela Marina? -Me tuve que retirar por salud. -¿Es cierto que el problema tuvo que ver con una antigua adicción a las drogas? -Lo que pasa es que el ser humano tiene muchas carencias y yo no fui la excepción. Cuando te sucede esto te refugias en cosas que no debes y yo me aferré a sustancias indebidas, pero gracias a Dios ahora estoy al fin del otro lado. -¿Estarías con una mujer tan mayor como Victoria? -(Risas) No lo he pensado, nunca se sabe... -¿Estás casado? -Sí, estoy felizmente casado, mi esposa es arquitecta y tengo una hija de cuatro añitos, Lorenza. -¿Después de Victoria qué harás? -Terminamos de grabar la novela en junio. Después tengo proyectos para hacer teatro y por allí algunas ofertas para la televisión, pero no me gusta adelantar hasta tener definidas las cosas.