Arequipa todavía está libre de gripe aviar en aves domésticas
Caso. La semana pasada se detectó el virus en aves de una granja de Moquegua. Senasa continúa vigilancia en la región.
El pasado 13 de junio, un total de 413 aves de corral de una granja localizada en el distrito de El Algarrobal, en la provincia de Ilo (Moquegua) fueron sacrificadas por haberse presentado el primer caso de influenza aviar en aves domésticas en esa región. El lugar fue puesto en cuarentena durante 30 días por el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa). En ese lapso se está realizando un monitoreo de las granjas y criaderos de aves de la zona.
Según las autoridades de Senasa, hasta la fecha en Arequipa no se ha presentado contagios entre aves de traspatio. Por lo que el control y vigilancia se mantiene a nivel de las aves silvestres.
El responsable del sistema de vigilancia epidemiológica de Sanidad Animal de Senasa en Arequipa, William Díaz, sostuvo que la muerte de aves silvestres y lobos marinos en el litoral de la región ha disminuido, pero continúa presentándose. El equipo de recojo de los cadáveres realiza diariamente su labor. Desde noviembre de 2022 hasta la fecha, se han enterrado aproximadamente 36.000 animales, entre aves y lobos marinos.
Anteriormente, el Ejecutivo dispuso que la emergencia sanitaria por influenza aviar se extienda hasta el 31 de diciembre de 2023 a nivel nacional.
Entre las medidas que se dictaron se encuentra la prohibición de movilización de aves domésticas sin certificado sanitario y la prohibición de realizar eventos gallísticos en zonas donde se hayan detectado casos positivos, entre otros.
También se aplicaron vacunas a los animales. Se estima que en Arequipa, fueron vacunadas dos millones de aves.
Díaz sostuvo que hace dos semanas se realizó una reunión con Serfor y profesionales del Museo de Historia Natural de la Unsa, para acordar el fortalecimiento de las capacidades de diagnóstico de la enfermedad.
La hipótesis que manejan es que las aves también están muriendo por inanición.
Fenómeno El Niño
Díaz explicó que este fenómeno que trae consigo el calentamiento del mar genera un cambio de dinámica de los peces y de las especies que son el alimento de las aves costeras. Por ello, es que la hipótesis de la inanición se refuerza, debido a la escasez de alimentos. No se descarta que haya aves que mueran tanto por inanición como por gripe aviar.