Sociedad

Ocho universidades públicas tienen solo dos meses para conseguir licenciamiento

Se les acaba el tiempo. A la fecha, más de 110 mil alumnos viven en incertidumbre. La mitad de esta población la concentran la Villarreal, La Cantuta y la del Callao. Estas y la Gonzaga de Ica y la de Huacho tuvieron que desistir de algunas filiales y carreras.

A LA ESPERA. La Cantuta acelera el paso en sus trámites.
A LA ESPERA. La Cantuta acelera el paso en sus trámites.

Por estos días, la preocupación no solo se respira dentro de las universidades privadas cada vez que se publica una resolución del Consejo Directivo de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu). Y es que alrededor de 110 mil estudiantes de ocho universidades públicas también viven días de gran incertidumbre porque, a dos meses de que culmine el proceso de licenciamiento, sus autoridades no han podido demostrar que sus casas de estudio cumplen con las condiciones básicas de calidad para seguir funcionando.

Y son tres las universidades estatales emblemáticas sin licenciamiento, de Lima y Callao (la U. Federico Villarreal, La Cantuta y la del Callao), las que concentran casi el 50% de los estudiantes matriculados (más de 50 mil).

A estas se suman cinco universidades de regiones: San Luis Gonzaga de Ica, José Faustino Sánchez Carrión (Huacho), la de Tumbes, la Pedro Ruiz Gallo (Lambayeque) y Micaela Bastidas de Apurímac.

Todas ellas siguen subsanando las observaciones halladas por la Sunedu durante el proceso de licenciamiento iniciado en diciembre de 2015. Sin embargo, se encuentran contra el tiempo.

Según la Sunedu, entre los problemas que tienen las universidades públicas figuran los relacionados a la gestión administrativa, al número de las filiales y carreras, así como a las modalidades de estudio. Pero ¿qué trabas originan que estas ocho casas de estudio no logren su licenciamiento? La República pasa a explicar.

Caso Villarreal

La Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV) tiene un Plan de Adecuación aprobado, lo que quiere decir que debe respetar los compromisos que aceptaron para superar las observaciones halladas por Sunedu al evaluar sus condiciones mínimas de calidad.

Para lograr su meta, el rector de la UNFV, Juan Alfaro, explica que la universidad debe desistir de cinco carreras de la modalidad semipresencial (educación de idioma inglés, administración, contabilidad, economía, e ingeniería industrial y de sistemas). Luego se tiene que suprimir el Centro Universitario de Educación a Distancia porque al no tener estos programas no tiene sentido seguir operando.

"Este es el último paso que debemos oficializar. Esta semana la Asamblea Universitaria debe aprobar el desistimiento de las carreras, la supresión del centro y modificar el estatuto para legalizar el traspaso de los 2.500 alumnos de semipresencial a la modalidad presencial. Con eso habremos cumplido con las observaciones y estaríamos a la espera del licenciamiento", afirma Alfaro, quien agrega que para cumplir las exigencias fue importante la transferencia de 13 millones que aprobó el Ministerio de Educación (Minedu). "Los recursos sirvieron para mejorar los laboratorios, equiparlos y mejorar la infraestructura".

La del Callao y su filial

A diferencia de la UNFV, la Universidad del Callao (UNAC) tiene mayores retrasos, ya que aún está en la primera etapa del licenciamiento (revisión documentaria). Así, por recomendación de la Sunedu, la Asamblea Universitaria debió aprobar el desestimiento de su filial en Cañete porque no cumplía con una infraestructura adecuada para los 2.500 alumnos de sus siete facultades (administración, contabilidad, enfermería, así como las ingenierías Ambiental, de Sistemas, Industrial y de Alimentos).

Lo mismo pasó este mes con un laboratorio en Chucuito. "Sabemos que es por el licenciamiento, pero este año se invirtió demasiado dinero en el laboratorio para que al final lo cierren. No se entiende", señaló la comunidad de Estudiantes UNAC, que critica a su rector Baldo Olivares.

Acciones en La Cantuta

Otra que tiene mayores avances en el proceso de licenciamiento es la Universidad Nacional Enrique Guzmán y Valle, conocida como La Cantuta. Pero debe subsanar aún las observaciones encontradas por la Sunedu.

Según el rector, Luis Rodríguez, se les requirió renunciar a sus modalidad semipresencial en pregrado y posgrado porque no cuentan con una plataforma virtual adecuada. "Se han dejado sin efecto los programas itinerantes de complementación académica y segunda especialidad; así como de maestría y doctorado, lo que generaba polémica por la forma cómo las promotoras, con las que se firmaba un convenio, brindaban el servicio", explicó una fuente de la Asamblea Universitaria, la cual terminó aprobando la medida. Sin embargo, La Cantuta aún tiene trabas en el saneamiento legal de una parte de su terreno.

Demoras en Ica y Huacho

En mayo pasado, la Asamblea Universitaria de la Universidad Nacional San Luis Gonzaga de Ica (Unica) acordó el cierre de por lo menos tres carreras y una serie de maestrías y segundas especialidades, debido a que –al no contar con personal docente– ponían en riesgo la autorización. En agosto último, el rector Anselmo Magallanes precisó a un medio local que la Unica estaba a un paso de su licenciamiento y que solo faltaba cumplir con protocolos de seguridad para sus laboratorios.

En el caso de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión, en Huacho, esta –mediante su Plan de Adecuación– desistió de sus filiales de Oyón y Lunahuaná (Lima), así como de Huari (Áncash). La Sunedu no aceptó la renuncia voluntaria de su filial de Huancané (Puno) porque –a diferencia de las demás– no presentaba un plan de reubicación de sus estudiantes.

Unamba a la espera

El rector de la Universidad Nacional Micaela Bastidas de Apurímac (Unamba), Alfredo Prado, precisó que –durante el licenciamiento– se llegó a un acuerdo para que no se cierren sus tres filiales (Haquira, Tambobamba y Vilcabamba) ubicadas en la misma región.

“Tuvimos 23 observaciones relacionadas a documentación, protocolos de seguridad de laboratorios, infraestructura y equipamiento, pero ya las corregimos”, dijo.

Últimos casos

La universidad de Tumbes presentó su Plan de Adecuación y la Pedro Ruiz Gallo aún sigue en la primera etapa del licenciamiento. Siguen el proceso en medio de irregularidades por parte de sus funcionarios. Ambas fueron afectadas por el fenómeno El Niño costero.

Jefe de la Sunedu: “Están por entrar a la etapa final”

En una reciente entrevista para este diario, el jefe de la Sunedu, Martín Benavides, afirmó que al menos cinco universidades están por ingresar a la etapa final del proceso de licenciamiento. “Ya se está preparando el informe técnico de la Gonzaga de Ica, y la Villarreal está terminando su Plan de Adecuación. Tanto en estas dos como en La Cantuta, la Sunedu ya ha ejecutado una diligencia de actuación probatoria”, explicó.

Dijo además que en el caso de la Unamba y la de Huacho, sus informes técnicos estarían saliendo en diciembre próximo.

La palabra

“El proceso de licenciamiento nos ha ayudado a ordenar la universidad. Yo confío que, en noviembre, la Villarreal pueda obtener su autorización para concretar los proyectos que ya empezamos”.

Juan Alfaro, Rector de la UNFV

“Encontré una universidad con conflicto de intereses y precariedades. En esta evaluación no hemos cerrado ninguna filial en beneficio de la población de Apurímac. Esperamos el licenciamiento”.

Adolfo Prado, Rector de la Unamba

Sunedu

Sunedu