Política

Eduardo Ballón: “Presencia de Betssy Chávez es suficiente para negar confianza al nuevo gabinete”

El antropólogo de la PUCP analizó el nuevo capítulo del enfrentamiento entre el Poder Ejecutivo y el Congreso. “Ante la conflictividad sin resultados, uno tiene derecho a pensar que en la práctica hay un acuerdo para prolongar ese juego, porque nadie quiere irse”, señaló.

Opinión. Especialista dice que Ejecutivo y Legislativo compiten para ver quién lo hace peor. Foto: difusión
Opinión. Especialista dice que Ejecutivo y Legislativo compiten para ver quién lo hace peor. Foto: difusión

El antropólogo Eduardo Ballón advierte que con el nombramiento de Betssy Chávez, el Ejecutivo ha recompuesto algunas relaciones para mantener el peso necesario en el Congreso y bloquear votaciones importantes. Sostuvo que un Parlamento coherente le negaría la confianza al nuevo gabinete, pero con este Legislativo no se sabe.

— ¿Se agudizan los enfrentamientos del Ejecutivo con el Legislativo con el nombramiento de Betssy Chávez?

— En términos generales, diría que es más de lo mismo. Un Ejecutivo que mantiene una actitud provocadora, porque nombrar a Betssy Chávez puede ser leído como una provocación; es decir, una voluntad de mantenerse en el mismo camino, pero a la vez recomponer algunas de sus relaciones, calculando mantener el peso necesario en el Congreso para bloquear votaciones importantes. Por otro lado, un Congreso que combina la decisión de no irse bajo ninguna circunstancia y la preocupación por no ceder al Ejecutivo la denominada bala de plata. Eso es lo que explica la acción que han aprobado ante el Tribunal de Garantías Constitucionales.

— ¿Este nuevo gabinete fortalece al Ejecutivo en el Congreso? ¿Fortalece su blindaje?

— A lo que apunta es asegurar los votos que se le podían ir, me estoy refiriendo al apoyo de Perú Libre y del Bloque Magisterial, que han incrementado su presencia en el gabinete. La presencia de la nueva ministra de la Mujer, Heidy Juárez, da la impresión de ser un pago por los servicios prestados, habida cuenta que siendo parlamentaria de Alianza para el Progreso estuvo involucrada en la grabación de una reunión interna que terminó con la figura de la congresista Lady Camones y tras haber sido una férrea opositora del Gobierno, termina ascendiendo a ministra. Da la impresión que llegó a donde quería.

— ¿Están haciendo las cosas sin ningún pudor?

— Eso es en ambos lados. El Congreso no tuvo mucho pudor para presentar ese mamarracho de suspensión por traición a la patria. Están en competencia de quien lo hace peor, y eso es lo que explica de alguna manera el malestar creciente de la gente y el incremento de sectores de la opinión pública que sostiene que si se va Castillo, se tiene que ir el Congreso.

— ¿Con la demanda al TC quieren anular la bala de plata y apuntalar la suspensión del presidente Castillo?

— Así es. Por lo pronto, quieren anular la denominada bala de plata, pues temen el cierre del Congreso. Seguramente algunos congresistas están pensando que eso les abriría espacio para una infracción constitucional que pueda sacar a Castillo.

Betssy Chávez asumió la PCM. Foto: Presidencia

Betssy Chávez asumió la PCM. Foto: Presidencia

— Mientras tanto, la población en medio de la crisis.

— En el medio está la población, que no le interesa ni a unos ni a otros. La evidencia la hemos tenido en la última semana. Mientras ellos peleaban, teníamos la paralización de los transportistas, el paro de 48 horas de las organizaciones agrarias de la macro sur, la advertencia y el ultimátum de Puno, los problemas en el corredor minero, entre otros. Es decir, para la sociedad la vida sigue, hay demandas, conflictividad y al Ejecutivo y Legislativo eso no les interesa.

— Hace varios meses estamos con el tema de si se va o no Castillo. ¿Cómo lo ve ahora?

— Ante la conflictividad sin resultados, uno tiene derecho a pensar que en la práctica hay un acuerdo para prolongar ese juego, porque nadie quiere irse.

— ¿Llegaremos a fin de año sin resolver la crisis?

— Es difícil decir como llegaremos a fin de año, porque nuestra institucionalidad, que nunca ha sido muy fuerte, está cada vez más atravesada y más involucrada en el conflicto que estamos viviendo. La situación del Ministerio Público es apenas un síntoma de esa mala politización que empieza a observarse en las distintas instituciones, que de alguna manera, y así no lo digan, van tomando partido por alguno de los bandos.

— ¿El Consejo de Estado es una muestra de la precariedad de nuestras instituciones?

— No es muy frecuente que sea el Poder Judicial que no convoque al Consejo de Estado. La fiscal de la Nación señaló que por estar en investigando a Castillo no iba a ir y tampoco fue el presidente del Congreso, por lo tanto, es obvio que este Consejo de Estado cada vez es más precario. Es evidente que la crisis de poder, que la disputa miserable entre el Ejecutivo y el Legislativo, va arrasando con una institucionalidad que nunca ha sido particularmente fuerte.

— ¿Cómo ve el nombramiento de Aníbal Torres como asesor en la PCM?

Diría que es parte de un chiste, del patetismo que se ha instalado en la política de ambos bandos. Nombrar a la congresista Juárez como ministra de la Mujer, es una manera infantil de sacarle la lengua al Congreso y lo mismo pasa con el nombramiento de Aníbal Torres.

— ¿Buscan que rechacen a este gabinete para hacer uso de la segunda bala?

— Es posible, pero no necesitaban nombrar a Aníbal Torres asesor, habiendo nombrado a Betssy Chávez ya le dan suficiente argumento al Congreso para que le niegue la confianza. La señora fue censurada en la cartera de Trabajo y está siendo investigada por abuso de poder, en teoría, por haber designado a familiares de quien sería su pareja. Es evidente que nombrarla ya es suficiente provocación.

— ¿Un Congreso coherente lúcido no la daría la confianza a este gabinete?

Exactamente, pero con este Congreso y en este momento no se sabe lo que puedan decidir. Tenemos a dos cabezas de esos sectores enanos. El presidente Castillo y un sector creciente en el Parlamento, empeñados en reducir la política e intereses del país a la liquidación del otro. En un caso la vacancia o suspensión de Castillo. Y en el otro, el cierre del Legislativo.