Política

“Hay diálogo cínico entre el Ejecutivo y el Congreso”, afirman analistas políticos

Postura. Analistas dicen que existe un nivel de enfrentamiento irracional que obliga a acortar el mandato de ambos poderes.

Precisiones. Destacado jurista Walter Albán indica que nadie cree en el Congreso ni en el Ejecutivo. Foto: Virgilio Grajeda/La República
Precisiones. Destacado jurista Walter Albán indica que nadie cree en el Congreso ni en el Ejecutivo. Foto: Virgilio Grajeda/La República

Analistas políticos expresan su preocupación por los niveles a los que está llegando el enfrentamiento entre la oposición y el gobierno, con alto grado de agresión verbal, y dan una salida a esta situación que está afectando grandemente al país.

Walter Albán sostiene que no existe ninguna posibilidad de que se recupere la capacidad de diálogo entre el gobierno y la oposición y que se ha llegado a una realidad en la que tanto el Ejecutivo como el Congreso están absolutamente desacreditados. Precisa que la única salida que brinda la expectativa de tener algo mejor es acortar el mandato de uno y otro lado.

“Todo lo demás es un diálogo cínico, un diálogo sin ninguna posibilidad de desarrollo. Lo que se demuestra es que el discurso es un discurso hueco, más allá de que en algunos momentos haya declaraciones de voluntad de entendimiento. La realidad es que todos juegan para su propio interés y el país se ha dado cuenta de eso hace rato, las encuestas lo indican; nadie cree en este Congreso ni en este Poder Ejecutivo”, anota Albán.

Menciona que el presidente Castillo sabe perfectamente que su problema con el Perú no es conducir los destinos de esta nación, su problema es dar cuenta de todo lo que ya ha podido ser de alguna manera verificado o por lo menos vislumbrado respecto a responsabilidades muy serias de corrupción.

Y respecto al Congreso, señala que han peleado hasta el final por un poder efímero porque no son capaces de darse cuenta que están peor que el presidente, y eso ya es decir demasiado.

“Es como una pelea de cachascán donde dos rivales se insultan, se golpean de mala forma, pero a la hora de ponerse de acuerdo en lo peor para el país ahí votan todos. Eso es claro, la población ya lo entendió, la ciudadanía peruana en todas las encuestas lo indica. El presidente Castillo ya no tiene credibilidad, pero el Congreso está peor”, afirma Walter Albán.

Por su parte, José Alejandro Godoy coincide en que los niveles de discusión son demasiado encontrados respecto a la forma de hacer política, de querer sacar el uno al otro. Por ello, la posibilidad de un diálogo racional es más complicada.

“Es cierto que en algunos temas hay coincidencia, pero no son necesariamente los que benefician al ciudadano. Lo que pasa es que no hay mucha argumentación, no hay discusión de fondo en general y lo que se tiene finalmente son posiciones a ver quién saca al otro”, comenta.

Y agrega que una salida de corto plazo a esta crisis podría ser que ambos den un paso al costado como pide la sociedad civil. “De momento es la solución porque la ciudadanía está insatisfecha con ambos. Los dos están teniendo problemas de credibilidad muy serios. Es muy difícil que se recupere la racionalidad porque son actores que maximizan sus intereses particulares antes que ver intereses de fondo”, sostiene Godoy.

La clave

Voz. Adriana Urrutia, de Transparencia, se pronuncia por un diálogo democrático en que los actores reconozcan a sus opositores no como enemigos sino como interlocutores válidos.