Política

Rosa María Palacios: “Estamos en un proceso de ruptura del poder de las mafias enquistadas en la política”

La periodista y abogada que trabaja en esta casa editorial explicó sobre las implicancias del destape por el caso Patricia Benavides y la situación del Congreso de la República.

Optimista. Palacios considera que, luego del destape del caso Benavides, “es muy difícil sostener un pacto corrupto en el poder si es que no hay cooperación”. Foto: difusión
Optimista. Palacios considera que, luego del destape del caso Benavides, “es muy difícil sostener un pacto corrupto en el poder si es que no hay cooperación”. Foto: difusión

En medio del ajetreo de los exámenes finales que vive como docente universitaria y entre la crisis política y constitucional que vive el país, que además cambia casi cada hora, nos reunimos con la periodista que trabaja en esta casa editorial, Rosa María Palacios, para discutir sobre lo que implica el destape del caso Benavides y el Congreso para la inestabilidad multisistema de largo aliento.

-La JNJ decidió iniciar proceso disciplinario contra la fiscal Benavides. En el caso de Chávarry duró entre un año y año y medio. ¿Cuánto tiempo supone que le tome a la JNJ emitir una sanción?

-La JNJ está actuando dentro del marco de su reglamento de procesos disciplinarios. Ha abierto proceso inmediato, sin investigación preliminar, porque la conducta es notoriamente irregular con prueba evidente de conocimiento público.

El miembro instructor puede sustentar una medida de suspensión preventiva fundamentada en los elementos graves de convicción y la necesidad de que no se perturbe la actividad probatoria. La fiscal tiene derecho a ser oída por la JNJ. Y luego se adopta la medida de suspensión provisional de inmediato. Mientras tanto, se continúa con el proceso de destitución. ¿Cuánto tiempo? Creo que la suspensión preventiva en menos de 5 días y la destitución en proceso abreviado de no más de un mes.

-Se habla de que el caso Benavides es el principio del fin. Lo dijiste también en una entrevista con Pedro Salinas. ¿A qué fin te refieres?

-Es bastante incierto, como todo en el Perú. Ahorita estamos en la fase manicomio-caníbal: “Yo te como, tú me comes”. Cuando ayer todos esperábamos que Benavides deslindara de su asesor, no dijo ni una palabra y, al contrario, decidió acusar constitucionalmente a Dina Boluarte. ¿Qué clase de reacción es esta con su lobby en el Congreso?.

-Expone el pacto...

-Claro. Y lo que presumimos es que el pacto se acabó desde que aparecieron denuncias contra Otárola porque este mismo identificó a Villanueva como la persona que filtra a la prensa la información que él tiene con estas señoritas a las que les da trabajo. Lo que vemos es el fin de un pacto que se resquebraja frente al público. Un pacto -que estaba organizado en el delito- para controlar espacios de poder.

-¿Este final puede dilatarse con recomposiciones en el poder?

-Creo que el pacto ha terminado. Espero eso aún y cuando hay varias recomposiciones. Los comunicados de Fuerza Popular y APP son para morirse de la risa. Quieren justificar la destitución de Zoraida Avalos, con cualquier cosa que no sea lo que se dice claramente en los chats: la compra de conciencias de votos en el Congreso. O justificar una denuncia constitucional contra Dina Boluarte, cuando todos sabemos que el artículo 117 de la Constitución no lo permite. ¿De qué acusación constitucional estamos hablando? Si Dina Boluarte, en el supuesto negado, fuera acusada y renuncia antes, se tiene que convocar elecciones generales y tendría que irse todo el Congreso. Si fuese verdad que el Congreso quiere acusar a Dina Boluarte, se tendría que ir todo el Congreso con ella. Y de ahí viene otro fin: se acaba nuestra permanencia en el poder porque nos vamos a elecciones generales.

-Hay algunas voces pidiendo elecciones generales

-Yo he pedido elecciones generales desde el primer día desde que Pedro Castillo estaba en el poder para salir de la crisis que era evidente que solo se iba a profundizar si no hacíamos algo. Pero bueno...

-Has hablado del artículo 117 y hoy la presidenta ha anunciado que ha renunciado a la inmunidad presidencial

-¡No se puede! Hay que informarle a la señora Boluarte que hay cosas a las que uno no puede renunciar. Un congresista no puede renunciar a ser congresista porque el mandato es irrenunciable. Ella no puede renunciar a la inmunidad. No le compete.

-Es una acción ilegal

-Es absolutamente inconstitucional. No puede renunciar a su inmunidad. Puede decirlo. Es más, lo sabe porque Otárola se lo ha explicado. “Tú di que vas a renunciar y todos sabemos que no vas a hacerlo porque no se puede”.

-Es una pechada a la fiscal Benavides o un simple engaño

-Es un engaño a la opinión pública, como tantos que Boluarte ha perpetrado durante su gobierno. Ella sabe perfectamente que no le van a levantar la inmunidad. No pueden levantársela. No puede ser acusada, porque la Constitución la prohíbe. Y este Congreso no le ha dado la gana de modificar el 117 como lo pedimos en la época de Castillo. No les dio la gana. Ahí tienen pues. Están atrapados todos. Si de verdad quisieran sacarla, se irían todos.

-Recordabas una imagen que te había dicho Alberto Vergara de que la crisis era como un jinete del lejano oeste huyendo con el botín mientras disparaba a quienes venían tras él. Pero hoy parece ser que ese jinete ya fue alcanzado y todos están apuntándose, poniéndose a todos en jaque

-(Risas) Marco Sifuentes puso un meme de una escena de The Office, de tres personas apuntándose, pero con los dedos. (Risas). Claro, eso es lo que pasa en verdad. Esto se ha descolocado, todos desconfían de todos. El Congreso no sabe quién es el topo. No sabe quiénes son los congresistas que han entregado los chats. Esos congresistas están protegidos por Marita Barreto y no van a hablar. Es posible que otros comiencen a pensar que, para no ser acusados luego constitucionalmente, decidan empezar a entregar sus pruebas al equipo de fiscales de Barreto. En esta situación se vive el dilema del prisionero. Cómo resuelves eso. Dina Boluarte, la fiscal Benavides, el Tribunal Constitucional, parte del Poder Judicial que han favorecido a Benavides, los congresistas, el defensor del Pueblo... son demasiados políticos. En el fondo, la única solución es devolverle el voto al pueblo.

-Por eso el Congreso está destruyendo reformas para garantizar que los mismos partidos controlen la oferta electoral

-Volvemos a votar. No hay de otra. No es un asunto ideológico. No es una discusión conservadores y caviares. No hay nada de eso. Esto es mafia. Es una mafia que tiene un lenguaje que Villanueva ha usado en sus chats. Son los caviares, son los lagartos, son los vizcarristas. Es el lenguaje de la mafia para justificar lo injustificable. La señora Benavides quería cosas concretas: controlar la JNJ para que nunca se le investiguen por sus delitos, y controlar la Junta de Fiscales Supremos para que ella fuera por siempre la fiscal de la Nación.