Política

Castillo y Torres se lavaron las manos y no observaron contrarreformas electorales

Ahora el Congreso podrá promulgar una ley con nombre propio a favor de APP y RP, y el JNE tendrá que decidir si ejerce el control de constitucionalidad.

El presidente Pedro Castillo y el premier Aníbal Torres decidieron no observar la autógrafa de contrarreformas electorales que aprobó el Congreso de la República. Tampoco lo promulgaron. Decidieron lavarse las manos y dejar que la titular del Parlamento, María Alva, promulgue directamente la norma.

Ayer, 31 de marzo, venció el plazo para que el Ejecutivo promulgue la norma. Cuando se aprobó el texto en el Congreso, Aníbal Torres había informado que iban a estudiar bien el tema.

“Esa situación la tenemos que estudiar bien en el Ejecutivo. No aseguro todavía si es que se va a observar, pero vamos a estudiar bien cómo resolver este problema”. Tanta habría sido la evaluación, que decidieron ponerse de perfil.

Implicancias

Con esta decisión del Ejecutivo, ahora María Alva (Acción Popular) puede promulgar libremente hoy la norma que tiene una serie de implicancias en relación con las elecciones regionales y municipales de 2022.

Por un lado, se trata de una ley con nombre propio a favor de Alianza Para el Progreso (APP) y Renovación Popular, partidos que podrán inscribir más padrones de afiliados, a pesar de que incumplieron con una resolución del Jurado Nacional de Elecciones (JNE).

Otra seria modificación es que ya no se cancelaría la inscripción de los partidos que incumplen con la obligación de presentar un mínimo de candidatos en los comicios de este año. Es decir, partidos limeños como Avanza País o el mismo Partido Morado seguirán vivos, sin presentar el mínimo de postulantes que exigía la ley.

En el Congreso se pusieron de acuerdo para suspender los efectos de esta regla. Esto a pesar de que las elecciones ya se encuentran convocadas, lo cual también afecta seriamente el principio de intangibilidad de las leyes durante los procesos electorales.

En manos del JNE

Esta contrarreforma fue aprobada con 82 votos de Fuerza Popular, Perú Libre, Acción Popular, APP, Avanza País y Renovación Popular.

Especialistas consultados sobre el tema precisaron que ahora el tema pasa a la cancha del JNE. Luego de la promulgación directa del Congreso, el JNE tendrá que decidir si ejerce o no el control de constitucionalidad para determinar si esta norma afecta o no otros principios, como la intangibilidad de las normas en pleno proceso.

De hecho, el presidente del JNE, Jorge Salas, ya había alertado sobre la afectación de este principio, cuando fue invitado por Patricia Juárez a la Comisión de Constitución para analizar el tema.