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Política

Gobierno amaina la crisis y saca a Héctor Béjar de Relaciones Exteriores

Reacción. Para poner orden en la Cancillería, el presidente Pedro Castillo se reunió en Palacio con los altos mandos de las Fuerzas Armadas. Luego de eso, el Ejecutivo informó que el ahora exministro de Relaciones Exteriores presentó su renuncia irrevocable al cargo. Aún se desconoce quién lo reemplazará.

Héctor Béjar solo duró 18 días en el gabinete Bellido. Iba a presentarse en el Congreso mañana, pero de pronto se decidió no prolongar más la crisis. Foto: Andina
Héctor Béjar solo duró 18 días en el gabinete Bellido. Iba a presentarse en el Congreso mañana, pero de pronto se decidió no prolongar más la crisis. Foto: Andina

Héctor Béjar dejó de ser el canciller luego de la crisis desatada por sus comentarios sobre el origen del terrorismo en el país.

Fue la salida que encontró el presidente Pedro Castillo para intentar calmar la situación y poner orden en la Cancillería. En realidad, Béjar iba a ser de todas maneras censurado por el Pleno. En vez de llegar a ese extremo, el Ejecutivo –contra las cuerdas– quiso dar un mensaje claro, sobre todo a las molestas Fuerzas Armadas. De hecho, el ministro de Defensa, Walter Ayala, ya había dicho que “compartía la indignación” del comandante general de la Marina, Alberto Alcalá. Ese mismo día, el premier Guido Bellido también había señalado que “lamentaba algunas declaraciones de integrantes del Ejecutivo”.

Si se le suma que el presidente Castillo no había dicho nada para defender al canciller, para todos los efectos el Gobierno ya le había bajado el dedo. Ayer solamente se confirmó lo inevitable.

Una escueta nota de prensa enviada desde el Despacho Presidencial anunció que Béjar había presentado su renuncia irrevocable y que Castillo se la había aceptado.

“El señor Héctor Béjar presentó hoy ante el presidente de la República, Pedro Castillo, su carta de renuncia irrevocable al cargo de ministro de Estado en la cartera de Relaciones Exteriores. En esa línea, el jefe del Estado aceptó la renuncia formulada por el señor Béjar Rivera”, decía el comunicado.

El lunes, en una reunión del Ejecutivo, el titular de Defensa había propuesto dos alternativas: o Béjar salía a aclarar sus afirmaciones y solicitaba disculpas públicas o daba un paso al lado. De acuerdo con el propio Ayala, el jefe del Estado también se sentía “incómodo” con la situación generada.

La intención original de Béjar era asistir el jueves al Pleno y responderles a los congresistas. Al menos así era hasta el lunes en que Relaciones Exteriores emitió un comunicado en ese sentido. El pliego interpelatorio contaba con 26 preguntas, algunas de ellas referidas al conocido pasado guerrillero del ahora excanciller.

Pero en Palacio de Gobierno no estaban dispuestos a que la tensa situación se extendiera.

Cancillería Manifestación

Ruido. Manifestantes protestaron ante Cancillería. Jorge del Castillo y Ricardo Burga arengaron. Foto: Marco Cotrina/La República

El 24 de noviembre del 2020, durante una conferencia virtual con el izquierdista Grupo Emancipador Perú, en el contexto de la represión a las protestas contra el efímero gobierno de Manuel Merino de Lama, Béjar afirmó que “el terrorismo en el Perú lo inició la Marina, eso se puede demostrar históricamente, han sido entrenados para eso por la CIA”. También indicó que Sendero Luminoso “ha sido en gran parte obra de la CIA y de los servicios de inteligencia”.

El video ya circulaba en redes sociales desde hace días. Luego de que el programa Panorama lo lanzara el domingo 15, la Marina expuso su abierta disconformidad en un comunicado. Congresistas de oposición, algunos de ellos exmilitares, se sumaron a los cuestionamientos. Asimismo, la Asociación de Funcionarios Diplomáticos en situación de Retiro también rechazó las palabras de Béjar.

Incluso el procurador de la Marina de Guerra le envió una carta notarial en la que le exigía una rectificación. Por el tono inusualmente brusco de la misiva, Béjar lo consideró una amenaza, y así lo hizo saber en su cuenta de Facebook.

Frente a ello, el régimen de Castillo no supo cómo enfrentar la situación y terminó sufriendo su primera gran derrota. Béjar duró en el cargo apenas 18 días.

“Yo esperaba hablar en la interpelación y tengo entendido que ellos (los congresistas) han pedido mi renuncia antes para evitar que yo hable ante el Congreso, ha sido una forma de censurarme’, dijo el excanciller en entrevista a Prensa Latina, donde precisó que Bellido le pidió la renuncia.

“Acepté el cargo sabiendo que estaba en una situación inestable en un país de política inestable y desde un comienzo sabía que todas las posibilidades estaban abiertas”.

Visitas

Antes de que la salida de Béjar fuera anunciada por el Despacho Presidencial, Castillo se había reunido en Palacio con los altos mandos de las Fuerzas Armadas. Según el Portal de Transparencia, llegaron a las 10:34 a.m. el comandante general de la Marina de Guerra, Alberto Alcalá Luna; el comandante general de la Fuerza Aérea del Perú, Jorge Luis Chaparro; el comandante general del Ejército, José Alberto Vizcarra; y el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Manuel Gómez de la Torre Araníbar.

Walter Ayala

Presión. Walter Ayala, ministro de Defensa, emplazó a Béjar. Foto: John Reyes/La República

También estuvieron el ministro Ayala y el embajador Manuel Rodríguez Cuadros, quien fuera voceado como canciller durante la transición. El propio Ayala consideró como una “posibilidad” que aquel asuma Torre Tagle. Ya ha tenido esa responsabilidad en el gobierno de Alejandro Toledo y es un diplomático de carrera. Pero cuando se retiró de Palacio al mediodía, dio a entender que no le habían hecho una propuesta de esa naturaleza. Sin embargo, cerca de las 6 p.m. ingresó de nuevo a la sede del Ejecutivo. Hasta el cierre de esta nota, no se sabía quién reemplazaría a Béjar.

“Tendremos cambios para la marcha del país”, fue la frase que el premier Bellido escribió en Twitter al mediodía.

Aparte de la de Béjar, se especuló sobre la remoción de Ayala del Mindef, aunque este negó esa versión. “Todos los ministros estamos con la confianza del presidente. Desde un primer momento he apoyado a la Marina de Guerra del Perú y a los comandantes generales”, señaló a RPP.

Igual, al final del día volvió a rumorearse su cambio, y se voceó como su reemplazo al Gral. EP Jorge Chávez Cresta, quien ya ha sido ministro de Defensa.

El gabinete deberá acercarse al Pleno el 26 para exponer su plan de trabajo y solicitar la investidura. Desde Piura, el ministro de Vivienda, Geiner Alvarado, mostró su optimismo de que el Congreso les dará los votos necesarios.

Por lo pronto, que Béjar deje el Ministerio de Relaciones Exteriores ha sido recibido como un “gesto positivo” desde las bancadas. Es verdad que algunas agrupaciones como Renovación Popular insisten en que se necesitan más modificaciones en el equipo ministerial, y de hecho el propio premier Bellido es uno de los más resistidos; no obstante, el recambio en la Cancillería al menos le baja algunos decibeles al ruido político.

Manuel Rodríguez Cuadros

Testigo. Manuel Rodríguez Cuadros estuvo dos veces en Palacio. Foto: John Reyes/La República

Desde que Castillo anunció a los integrantes del primer gabinete del quinquenio, las críticas arreciaron. Incluso se llegó a especular sobre que la real intención era presentar a un “grupo de choque” para forzar a que el Pleno rechace la confianza y así perfilar un escenario conducente a la disolución constitucional del Congreso. Si ese hubiese sido el caso, entonces a Béjar lo hubieran mantenido.

Mal manejo político de una crisis

Por Óscar Vidarte, internacionalista

La renuncia de Héctor Béjar refleja dos grandes problemas. Primero, el pasado de Béjar, pero sobre todo las declaraciones en un pasado no tan lejano, sino bastante reciente. Declaraciones que en su momento debieron ser explicadas, y Béjar permitió que la bola de nieve creciera hasta tal punto que sea insostenible su permanencia en la Cancillería. Este ámbito (sus declaraciones) puede ser muy discutible. Lo segundo es que su renuncia ha demostrado un mal manejo político de situaciones de crisis, considerando que estamos en un gobierno que genera mucha desconfianza.

También esta falta de claridad se expresa en ciertas políticas que el gobierno iba a implementar. El tema del Grupo de Lima expresa una falta de definición del gobierno; hasta ahora no sabemos si el Perú se va a salir. Nadie sabe si el Perú piensa ser parte del Grupo de Contacto. Generan tantas dudas que, en un contexto político tan difícil, no era lo más aconsejable.

Reacciones

Indira Huilca, política

“Quien persigue a Héctor Béjar no es la Marina de Grau, es la que apaña a Montesinos en la Base Naval, la que está complacida con los que firmaron el acta de sujeción y hoy juegan al golpismo”.

Gladys Echaíz, congresista APP

“El señor ya renunció como respuesta a las declaraciones que ha tenido... Dejemos el tema ahí y que venga su reemplazo. Vamos a trabajar para construir; no echemos leña al fuego”.

Yonhy Lescano, dirigente de AP

“Es lo único que quedaba porque las declaraciones del canciller han sido absolutamente desafortunadas. Es la Marina de Grau, de nuestro héroe. No se podía maltratar de esa manera”.

José Cueto, congresista de RP

“Seguramente que en las próximas horas nos vamos a enterar en positivo quién es (el nuevo ministro de Relaciones Exteriores). Esperemos que no sea de las mismas ideas manchadas de este señor Béjar”.

Rocío Silva Santisteban, política

“Ahora la derecha se siente ‘ganadora’ y van a ir uno por uno contra los ministros. Primero, los que no son de PL por ‘sacrificables’ como Béjar... ¡¡¡Cuidado!!! El golpe de Estado en cámara lenta”.

Ruth Luque, congresista de JPP

“Hay una lógica de parte de un conjunto de fuerzas políticas que parecen estar alineadas, a raíz de todas estas mociones que se han presentado, de generar una crisis e inestabilidad en el país”.

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