Excancilleres muestran su rechazo a implicados en caso Vacunagate
A través de un comunicado, seis exministros de Relaciones Exteriores se pronunciaron sobre la aplicación irregular de vacunas a funcionarios públicos.
Un grupo de seis excancilleres se pronunciaron respecto a la aplicación irregular de vacunas, entorno al caso Vacunagate y mostraron su indignación, aludiendo a que afectan la legalidad y ofenden la conciencia ética de la nación.
A través de un comunicado firmado por los exministros Eduardo Ferrero, Manuel Rodríguez, Rafael Roncagliolo, Diego García-Sayán, Óscar Maúrtua y Edda Rivas, indican que respaldan las acciones adoptadas para la investigación y la aplicación severa de las sanciones establecidas en la ley.
“Los graves hechos producidos han dañado gravemente la confianza ciudadana en la administración estatal y en importantes instituciones del sector privado. La indignación ciudadana es legítima y la compartimos plenamente. El Servicio Diplomático, una de las instituciones más sólidas y prestigiosas a lo largo de nuestra historia, ha sido también afectado. Corresponde a sus miembros reparar este daño, recuperar su prestigio y la confianza ciudadana”, se lee en el pronunciamiento.
En la misma línea, indicaron que respaldan las medidas tomadas por el flamante canciller Allan Wagner al separar de sus cargos a funcionarios implicados y al hacer que la investigación sea lo más rápida y efectiva.
Finalmente invocaron a los miembros del Servicio Diplomático de la República a “iniciar un proceso de reflexión colectiva y autocrítica sobre las implicancias éticas de lo ocurrido y sobre el modo en que debe prevenirse en el futuro, así como para enmarcar la conducta institucional en el estricto respeto y aplicación de la legalidad y los valores éticos que exige la nación”.
Comunicado de exministros de Relaciones Exteriores. Foto: difusión
Wagner sobre vacunas
El último sábado, el ministro de Relaciones Exteriores, Allan Wagner, señaló que 2.000 dosis de vacunas que brindó Sinopharm al Perú fue definido por el Ministerio de Salud y la Universidad Cayetano Heredia, mientras que la Cancillería fue solo un “conducto”.
“Esta decisión del Ministerio de Salud fue transmitida a la empresa Sinopharm a través de la Embajada de Perú en Beijing, actuando simplemente como conducto. Fueron la Universidad Cayetano Heredia y el Ministerio de Salud los que acogieron este ofrecimiento de Sinopharm y determinaron el número de dosis que se requerían. Concretamente fue el Minsa el que señaló que se requerían 2.000 dosis”, explicó en diálogo con RPP.
Newsletter Política LR
Suscríbete aquí al boletín Política La República y recibe a diario en tu correo electrónico las noticias más destacadas de los temas que marcan la agenda nacional.