Fiscalía incluyó a Mazzetti y Astete en investigación por caso Vacunagate
Las exministras serán investigadas por presuntos delitos de concusión y negociación incompatible o aprovechamiento indebido del cargo.
La Fiscalía de la Nación decidió ampliar la investigación preliminar sobre la vacunación irregular de funcionarios públicos e incluyó a la exministra de Salud, Pilar Mazzetti y a la excanciller, Elizabeth Astete por presuntos delitos de concusión y negociación incompatible o aprovechamiento indebido del cargo.
El pasado 12 de febrero, la titular de la cartera de Salud, Pilar Mazzetti, renunció a su cargo luego de ser citada al pleno del Congreso para responder sobre la vacunación irregular del expresidente, Martín Vizcarra.
Posteriormente, el 14 de febrero, la ministra de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, presentó su carta de renuncia luego de informar que ella recibió la vacuna Sinopharm a fines de enero.
Un día después, Mazzetti reconoció también haber recibido la vacuna fuera del ensayo clínico el 12 de enero de 2021.
Vacunagate: 487 personas accedieron irregularmente a la vacuna de Sinopharm
Según la información remitida esta por la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), son 487 personas las que accedieron de modo irregular a la vacuna de la farmacéutica china, Sinopharm.
En el documento se pueden ver, además de los nombres de Martín Vizcarra, Pilar Mazzetti y Elizabeth Astete, a la esposa (Maribel Díaz Cabello) y el hermano (César Vizcarra Cornejo) del expresidente y ahora candidato al Congreso por Somos Perú.
Asimismo, figuran el rector de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Orestes Cachay Boza y el vicerrector, Felipe San Martín Howard; el rector de la Universidad Privada Cayetano Heredia, Luis Varela Pinedo; la gerente general de Suiza Lab, Claudia Gianoli Keller; entre otros nombres relacionados al Minsa, la Cancillería, universidades, laboratorios clínicos y personal del Ejecutivo.
Sagasti: “A la crisis de salud, económica, social, se le ha sumado una una crisis ética y moral”
Ante esto, el presidente Francisco Sagasti se mostró preocupado y afirmó que, además de la crisis que vive el país por la pandemia de la COVID-19, se ha agregado una crisis de orden ético y moral.
“A la crisis de salud, económica, social, a la inestabilidad política que hemos vivido en los últimos meses se ha unido una crisis ética y moral”, indicó el mandatario durante su presentación en la sesión plenaria de la edición número 13 del GORE Ejecutivo.
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