Patinadas zodiacales del 2019
“Se trata de gente que no tiene empacho en predecir, como si fuera una transmisión de Twitch, muertes ajenas”.
Por enésima ocasión, los medios han vuelto a convocar a la misma gente que, año tras año, se esfuerza en patinar ante cámaras, haciendo predicciones que, invariablemente, jamás se cumplen pero que, aún así, consiguen hacerlos desfilar en todos los medios impunemente, sin que tengan que rendir cuentas jamás por todos sus fallidos augurios. No, esta vez no estoy hablando de los mismos analistas políticos fuji-apristas-ahora-castañedistas de siempre que suelen ser invitados estelares de todos los espacios periodísticos que los presentan como “objetivos” (es que, en estos momentos, esos analistas se encuentran muy ocupados con sus campañas electorales, en las que también fracasarán, para felicidad de los carentes productores televisivos que podrán volverlos a invitar hasta su próxima postulación, en un ciclo sin fin). No, no hablaré de ellos hoy.
Hablo de los videntes y brujitas a quienes los medios les piden, con absoluta irresponsabilidad, predicciones para el año siguiente. Se trata de gente que no tiene empacho en predecir, como si fuera una transmisión de Twitch, muertes ajenas. Por ejemplo, para el 2019, Agatha Lys, en Exitosa; Pochita, en Expreso; y Carmen Briceño, en ATV, dijeron, muy compungidas, que el entonces recién reencarcelado Alberto Fujimori entraría “en la fase final de su vida” (Lys) y que “su luz se apagaría” (Briceño).
Por cierto, ninguna de ellas –ni ningún otro de los múltiples adivinos del 2019– pudo predecir la noticia más chocante del año que pasó: el suicidio de Alan García. Agatha Lys dijo que “le llegaría la justicia a fin de año” porque “alguien que ha sido su pareja lo va a traicionar”. En la revista Somos, John Choy aseguró que García “está a buen recaudo, evaluando y asesorándose muy bien para que las cosas estén a su favor” y que “se encuentra más alerta que nunca”. En este mismo diario, Hayimi sí previó un suicidio, pero de “una mujer de la farándula con serios problemas de depresión”, lo que jamás ocurrió.
Choy dijo de Mercedes Aráoz que “va a tomar con pinzas ciertos temas y es una de las estrategas más inteligentes del Gobierno”, además de que “destaca por su intuición”. Ya. Pobre Meche. Mientras, Milagros Albarracín vaticinó que en el 2019 traían a Hinostroza y Toledo –que aún siguen en España y California– además de asegurar que sería “el año de la unión entre los peruanos”. Esto último daría risa pero… ¿acaso no estuvimos todos unidos y felices cuando disolvieron el Congreso? Touché, Milagros. De tanto patear al arco, algún gol tenían que meter.