Implementan programa de incentivos para que trabajadores antiguos del Congreso se retiren

Un programa de incentivos para que los trabajadores antiguos del Congreso se retiren de manera “voluntaria” fue implementado presumiblemente por la actual dirección de la Comisión Permanente, presidida por Pedro Olaechea junto con Salvador Heresi, Karina Beteta y Marvin Palma.

El “Programa de Incentivos por retiro voluntario” (sic), como se le denominó, fue lanzado el pasado 12 de diciembre, según imágenes del comunicado a los trabajadores del Congreso que obtuvo La República.

De acuerdo al “cronograma”, entre el 17 y el 19 de diciembre se recibieron las solicitudes para el retiro “voluntario” de los trabajadores.

Asimismo, se estableció que entre el 20 y el 24 de diciembre se evalúen los pedidos, cuyos resultados se publicarían en el portal del Congreso.

Del mismo modo, para el 26 y el 27 de setiembre se programó la firma de convenios de disenso; y el 30 de diciembre, se estableció como día para las “actividades propias de la extinción laboral convenida”.

Finalmente se determinó que el último día de labores sea el 31 de diciembre de esta año.

Según un reporte de Canal N, hasta noviembre de este año había 1600 trabajadores contratados en el Congreso, pese a que, en opinión del ex oficial mayor José Elice, la mitad podían cumplir con las funciones tras la disolución.

“El Congreso disuelto puede trabajar con un número muy pequeño de personas, yo calculo que no más de 800”, dijo Elice al mencionado canal.

De acuerdo a Canal N, también, el programa de incentivos habría sido acordado por la actual dirección de la Comisión Permanente, que preside Pedro Olaechea acompañado por Salvador Heresi, Karina Beteta y Marvin Palma.

“Esto va en contra no de los derechos de los trabajadores necesariamente, pero sí de lo que sucede en la mayoría de Parlamentos en el mundo donde se respeta mucho la experiencia sin importar la edad”, señaló Elice sobre el programa.

El ex oficial mayor del Congreso advirtió también que un programa de esta índole podría permitir que se contraten a personas vinculadas a posiciones políticas definidas.

“El ingreso, digamos, de una parte o de manera masiva de personas que ingresan a trabajar al Congreso de la República por vinculaciones políticas más que por competencias o ideas personales desarrolladas”, dijo.